“Conectar un objeto a Internet vía sensores costará menos de 1 euro a partir de 2020”, señaló David del Val, CEO de Telefónica I+D, dentro del Ciclo “Oportunidades para el negocio en la transformación digital” impulsado por la Asociación Española de Directivos, donde explicó las claves de Internet de las Cosas.
Pero para que este fenómeno pueda desarrollarse masivamente se tiene que reducir el coste de conectar un objeto a la red. “Por ello -apuntó- Telefónica está trabajando para abaratar el despliegue masivo de sensores y la estandarización del 5G”. “Las operadoras de telecomunicaciones - añadió- trabajan para rebajar la conectividad de los objetos, que, a diferencia de la conectividad de las personas, requiere menos velocidad, sensores robustos y baterías que duren de 20 a 30 años”. La conectividad permite que el objetivo exista fuera de sí mismo, lo que tiene connotaciones revolucionarias. “Un objeto conectado –señaló Del Val- permite a su productor saber cómo se usa, cuánto tarda en consumirse, qué le pasa con el tiempo y, por tanto, cómo fabricarlo mejor”.
Durante la conferencia, “Empresas en tiempo real: cómo beneficiarse de Internet de las Cosas”, Del Val expuso las oportunidades de las empresas para acercarse a los consumidores a través de Internet of Things (IoT) y cómo la revolución digital influye en la toma de decisiones de los directivos: "La conectividad abre posibilidades inimaginables para los fabricantes, por la relación directa que ofrece con el usuario. IoT convertirá a todos los fabricantes en productores de objetos digitales. Supone una revolución; pasará algo parecido a lo que ocurrió en los 90, cuando nos empezamos a digitalizar. En 2026 tendremos todos nuestros electrodomésticos conectados a IoT y en 2020 también lo estarán todas nuestras televisiones”.
Durante la conferencia, también se refirió a la plataforma FIWARE, impulsada por la Unión Europea y cuyo desarrollo ha liderado I+D, para fomentar que todos los objetos conectados utilicen el mismo lenguaje. “Internet de las Cosas” es un nuevo nicho de mercado se abre con este concepto en torno a una oferta innovadora y creciente de cosas capaces de percibir, procesar, transmitir y comunicar datos entre ellas. Son muchos los expertos del sector de las TIC que predicen que ésta será la siguiente tendencia empresarial tras el desarrollo del Smartphone y que afectará a sectores tan dispares como la educación, la sanidad, la industria, el turismo o el estilo de vida.
Pero para que este fenómeno pueda desarrollarse masivamente se tiene que reducir el coste de conectar un objeto a la red. “Por ello -apuntó- Telefónica está trabajando para abaratar el despliegue masivo de sensores y la estandarización del 5G”. “Las operadoras de telecomunicaciones - añadió- trabajan para rebajar la conectividad de los objetos, que, a diferencia de la conectividad de las personas, requiere menos velocidad, sensores robustos y baterías que duren de 20 a 30 años”. La conectividad permite que el objetivo exista fuera de sí mismo, lo que tiene connotaciones revolucionarias. “Un objeto conectado –señaló Del Val- permite a su productor saber cómo se usa, cuánto tarda en consumirse, qué le pasa con el tiempo y, por tanto, cómo fabricarlo mejor”.
Durante la conferencia, “Empresas en tiempo real: cómo beneficiarse de Internet de las Cosas”, Del Val expuso las oportunidades de las empresas para acercarse a los consumidores a través de Internet of Things (IoT) y cómo la revolución digital influye en la toma de decisiones de los directivos: "La conectividad abre posibilidades inimaginables para los fabricantes, por la relación directa que ofrece con el usuario. IoT convertirá a todos los fabricantes en productores de objetos digitales. Supone una revolución; pasará algo parecido a lo que ocurrió en los 90, cuando nos empezamos a digitalizar. En 2026 tendremos todos nuestros electrodomésticos conectados a IoT y en 2020 también lo estarán todas nuestras televisiones”.
Durante la conferencia, también se refirió a la plataforma FIWARE, impulsada por la Unión Europea y cuyo desarrollo ha liderado I+D, para fomentar que todos los objetos conectados utilicen el mismo lenguaje. “Internet de las Cosas” es un nuevo nicho de mercado se abre con este concepto en torno a una oferta innovadora y creciente de cosas capaces de percibir, procesar, transmitir y comunicar datos entre ellas. Son muchos los expertos del sector de las TIC que predicen que ésta será la siguiente tendencia empresarial tras el desarrollo del Smartphone y que afectará a sectores tan dispares como la educación, la sanidad, la industria, el turismo o el estilo de vida.