ETAPAS DEL PLAN DE COMUNICACIÓN (Continuación)
8.-Ejecución del Plan
De nada servirá una planificación meticulosa si, posteriormente, no es posible llevarla a efecto. La única razón de ser de un Plan es poder alcanzar los objetivos previstos en el escenario establecido. En nuestras organizaciones abundan los planificadores y escasean los ejecutores.
De ahí la importancia de una buena implementación del mismo, considerando aquellos puntos clave que se han definido en las etapas anteriores: objetivos, públicos a los que se dirige, mensajes a transmitir, medios y soportes a utilizar, recursos a aplicar y expectativas a crear con la Estrategia de Comunicación.
Especial consideración deberán tener, en esta fase, las denominadas etapas clave que constituyen el camino crítico del PERT.
9.- Supervisión y Control
Todo Plan debe llevar incorporados aquellos indicadores que permitan detectar las desviaciones que se produzcan como consecuencia de las modificaciones, no previstas, en el Entorno o en las audiencias principalmente.
Además, debe tener establecidos los posibles sistemas correctores que reconduzcan a la consecución de los objetivos a alcanzar y que permitan superar las posibles situaciones de crisis que puedan surgir.
En el Plan de Comunicación es importante controlar, de forma permanente durante todo su desarrollo, la evolución de la Imagen Corporativa de la Entidad, así como el grado de conocimiento de la misma, tanto espontáneo como sugerido, y el nivel de satisfacción con la Estrategia de Comunicación implantada.
10.- Marketing del Plan
Una vez que el Plan está definido, es necesario “venderlo” a los ejecutivos implicados en su desarrollo y a los públicos, externos e internos, interesados en el mismo. De ahí la conveniencia de proceder a hacer reuniones con directivos, en donde se les explique las líneas maestras del Plan y sus objetivos y motivaciones.
También es bastante habitual efectuar eventos y entrevistas con comunicólogos, así como presentaciones específicas a determinados líderes de opinión o a potenciales prescriptores. En ocasiones, es útil incorporar menciones específicas en las páginas web y en las redes sociales.
Es aconsejable, en estos actos, entregar un “Resumen Ejecutivo” del Plan de Comunicación que contenga una visión global del mismo, la justificación de su formulación, los objetivos que se pretenden alcanzar y una explicación de las posibles repercusiones que para la organización y sus Grupos de Interés pueda representar.
Concluimos esta serie incidiendo, una vez más, en el carácter estratégico del Plan de Comunicación y en la reciprocidad que se debe dar entre éste y el Plan de Marketing.
En un entorno social y económico en el que la Comunicación es la materia prima de las relaciones personales, profesionales y empresariales, despojar a la Comunicación de su carácter estratégico es poner en peligro no sólo la inversión realizada en la campaña, sino toda la esencia misma de la entidad.