Bitácora

Marketing para el Tercer Sector (1)

Redactado por Javier Barranco Saiz el Martes, 24 de Enero 2012 a las 08:03

Debido a la crítica situación económica, las perspectivas de las denominadas Entidades No Lucrativas, ENL, son bastante negativas. Sus naturales proveedores de recursos financieros: las Administraciones Públicas, las empresas, sus socios y sus benefactores individuales, están sumidos en una profunda crisis que se caracteriza por la palabra “recorte”.

Por el contrario, y debido a las mismas circunstancias sociales, el mercado de estas entidades aumenta, ya que es mayor el número de necesidades a las que atender y su tipología y características son, también, diferentes.

Todo esto va a implicar el que la mayoría de las ONG, de las Entidades No Lucrativas, se vean forzadas a modificar sus estrategias para convertirse en organizaciones prestatarias de servicios, en el concepto más comercial del término, siendo en esta transformación donde el Marketing deberá adquirir la importancia que va a tener en el nuevo panorama.



Cuando se pretende reducir gastos, inmediatamente se piensa en aquellas partidas presupuestarias que o bien no afectan directamente al negocio, en el caso de las empresas, o a la gestión básica del ciudadano, en el de las Administraciones Públicas, o en los gastos ineludibles en los particulares.

De ahí que el objetivo del recorte sean, principalmente, aquellas partidas que se refieren a la “solidaridad” con los más desfavorecidos. La consecuencia resultante es que las ONG están viendo mermadas, peligrosamente, sus fuentes de financiación y, por ello, los servicios que prestan a los colectivos necesitados.

En opinión de los especialistas, lo que surgirá después de esta crisis económica y de valores, será un nuevo orden mundial al que el Tercer Sector no puede ser ajeno. Como ya hemos indicado, en otras ocasiones, no estamos ante una crisis coyuntural más de las varias que hemos vivido desde los años setenta del siglo pasado, sino que se está produciendo una auténtica transformación estructural, un cambio hacia una nueva etapa de la que desconocemos sus principales parámetros.

Ante estas circunstancias, este tipo de entidades se van a ver obligadas a un cambio radical de filosofía de gestión y, en la mayoría de los casos, a modificar su actual estrategia mendicante por una de servicios que añada valor a su actividad y favorezca en mayor medida tanto a sus beneficiados como a sus benefactores.

En otras palabras: deberán aplicar, si quieren sobrevivir en un mercado social tremendamente competitivo por sus escasos recursos disponibles, una estrategia de Marketing que les permita distinguirse y posicionarse ante sus competidores.

Y no estamos disertando sobre un tema baladí, pues en palabras de Miguel Carballeda, Presidente de la ONCE y de su Fundación, la Economía Social agrupa a más de cuarenta y cinco mil entidades que emplean a más de dos millones de trabajadores y que facturan, aproximadamente, el diez por ciento del PIB de nuestro país.

De ahí la importancia de aplicar, en este tipo de organizaciones, aquellos sistemas de gestión empresarial que permitan crear riqueza y puestos de trabajo y, además, garantizar la protección social de los ciudadanos y de los colectivos más desfavorecidos.

En esta futura etapa que se vislumbra, una estrategia de Marketing facilitará, a las entidades del Tercer Sector, situarse en el nuevo mercado y lograr sus objetivos económicos y de servicio solidario. En los próximos artículos desarrollaremos los principios y características de este Marketing Social.
Martes, 24 de Enero 2012 | Javier Barranco Saiz
| Redactado por Javier Barranco Saiz el Martes, 24 de Enero 2012 a las 08:03