B.S.O. de este artículo: Discografía de The Doors, Johny Cash, Pearl Jam, Foo Figther, John Lee Hooker; de Bob Dylan: Blonde on blonde (1966), Bringing It All Back Home (1965), Bob Dylan (1962); Eddie Vedder en Into the Wild, Hallejuah de Jeff Buffckley, Ne regrette rien, Milor, Padam, de Edif Piaf. Acabamos con Free money, Gloria, y Horses, de Patti Smith.
Como Sikong Tu dijera en una carta del siglo IX, el punto de partida de una tradición crítica donde la propia crítica es literatura a la vez: “…que sea próxima sin ser superficial, y se expanda a lo lejos sin límite: sólo entonces se puede hablar de excelencia más allá de la resonancia”.
Remake 1: Una tradición poética en la cual la propia crítica es poesía al mismo tiempo.
Poesía de la lectura. Poesía de la otredad. El distanciamiento, el reflejo de lo personal mediante la transformación de lo leído en poesía. Fusión de crítica o ensayo y poesía.
Remake 2: Esta poesía se manifiesta como una comunidad de lectores, una enorme glosa interactiva, una expansión de nuestras lecturas.
“Mis dioses están en la tierra, no en otro lado”. Julio Cortazar.
La inserción de notas a pie de página en el poema es necesaria, en algunos casos, para esta intrapoesía, para indicar su referencia a un aspecto determinado del poema. Hacer una historia visible del poemario. Escritura de grado cero.
Denominaciones: Preferible: Poesía de la lectura o Poesía de la otredad. Aunque intrapoesía es el término más adecuado a nuestras intenciones por el ajuste del prefijo intra.
Remake 3: De la post-poesía se saca su gusto por el canibalismo literario, del transrealismo poético su inclinación hacia la conjunción de tiempos y espacios.
Apunte de vuelta: Poemario=Superposición de libros, pirámide de significados: ¿el sentido objetivo? Aproximar la poesía ¿a lo objetivo?
Cada libro de poemas debe ser una obra en marcha: reescritura continua, escritura mudable. En cada edad el poema tiene su propio rostro.
Si entendemos la poesía como una transposición de una crítica literaria, como un análisis de libros, como un acto de lectura, llegamos al poema-ensayo.
Este tipo de poetización se basa en la abstracción sensitiva o intuitiva, esto no significa caer en el oscurantismo, se pretende una línea reflexiva y lírica.
La crítica como imposibilidad analítica objetiva, es decir, convertida y entendida como ficción, se compromete a pasar al plano de la estética.
Remake (inversos): Convirtamos la tesis en síntesis.
“La crítica legítima tiene que adelantarse a las obras que ella critica: prácticamente tiene que inventar las obras que sea capaz de criticar. Y si es lo suficientemente productiva, a buen seguro habrá compositores que escriban tales obras" T. W. Adorno.
En este punto podemos aducir que nuestra pretensión se asienta en que la poesía se convierta en la invención de la obra que se analiza.
Primero la crítica y después el poema. Fusión y reescritura de ambas.
Antecedentes ejemplares y próximos a esta propuesta poética: “Advertencia al lector” o algunos poemas de “Also Sprach Huidobro” como “¿Qué diremos de él hoy 10 de enero de 1993?” “El galán absoluto según propia declaración” de Nicanor Parra, Hugo Mujica en Flechas en la niebla y Siempre después del viento, Carlos Marzal dentro de sus Metales pesados, Ricardo Defarges desde “Las fresas salvajes (Ingmar Bergman)” en Muere al nacer el día o Azorín (“Carrera, carrera”), Diego Jesús Jiménez en su “Homenaje a Lorca” o el prólogo en verso, entre muchos de sus poemas, de Carta entera de Luis Rosales, entre otros autores.
“La poesía no es un dejar huir la emoción sino una huida de la emoción; no es la expresión de la personalidad sino una huida de la personalidad.” T.S.Eliot.
Remake 4: Esta poesía crítica, esta intrapoesía, esta poesía de la lectura, expresa la función poética del pensamiento.
-Ponga en su batidora: un poco de culturalismo, algo de metapoesía, unos granos de poesía didascálica o poesía didáctica-filosófica, según se mire, análisis textuales, cinematográficos, históricos, etc, y se acercará al poema-ensayo.
En cuanto a crítica y ensayista:
La crítica como creación literaria, George Steiner, El siglo de Sartre, de Bernard-Henry Lévi, Michel Onfray en Teoría del cuerpo enamorado. Por una erótica solar, Octavio Paz en algunas pasajes de Signos en rotación, El arco y la lira, La otra voz, José Ángel Valente en Ensayos de Galaxia Gutenberg. Los libros de Lévy y Onfray son los dos mejores ejemplos.
Vicente Luis Mora en críticas como la de Fósforo astillado de Juan Andrés García Román; Marcos Antonio Núñez, Juan Manuel de Prada y Alvy Singer en algunas críticas cinéfilas.
Un deseo: recree y reviva la intuición y la emoción textual del autor en sus poemas. No su emoción, con esta propuesta poética nos distanciamos de nuestros sentimientos, de nuestras sensaciones identitarias. Estas proceden de la lectura, del cine o de la música. La vida propia en lejanía. La distancia del yo (arma de la poética) para no verlo morir.
El poema como la crítica literaria tiene que ser “un error sistémico que genera nuevas dimensiones de acierto”. El poema crítico: “selección válida para definir lo imprescindible de un libro”. (A través de Vicente Luis Mora).
Hacer que lo natural nos resulte raro y que lo extraño nos sea familiar.
Consiguió formar su propia identidad en el espejo de los autores que él interrogaba.
Desde este punto de vista, el poema es un ensayo sensitivo, es una “estructura lógica, donde la lógica se pone a cantar”.
Este tipo de poesía es una fusión de lo poético y lo argumentativo, pero sin privilegiar una de ellas.
“Preferir lo imposible verosímil a lo posible increíble”. ¿Aristóteles como lazo entre este tipo de creación poética y la heteronimia?
Propósito: lúdico-literario.
Una poesía alimentada por el dialogismo y la voluntad de interpretación.
Esta invitación: didáctica, explicativa, y, hasta cierto punto, perifrásica.
La creación poética puede ser una polémica de ausencias. Cortazar nos guiña un ojo.
Ella es el resultado de un encuentro cultural, que se realiza casi siempre por un contacto directo del autor (o refundidor).
«Abandonemos de una vez el amoroso cultivo de nuestras señas de identidad.» J. Goytisolo.
«invertir / el proceso creador; no de la emoción al poema, / sino al contrario». Guillermo Carnero.
Hacer del poema leído, de la película, cuadro, escultura vista o de la canción escuchada, un poema nuevo, una nueva crítica.
Esta manera de crear supone una variante de la heteronimia, puramente textual, de despojamiento, de testigo de otra creación, de despersonalizarse para ser la obra ajena, para dar a la creación artística sobre la que reflexionamos otra dimensión sonora.
La desvinculacion del ≪yo≫ autoral para convertirnos en el ≪tu≫ textual.
Acercarse al texto tanto en posición de crítico como en la de poeta. Que el resultado de nuestro trabajo dé lugar a un texto nuevo, en una traducción creativa de su significado y su sentido (desmontando a E. Pound).
El escritor no debe hacer alusión a su sentir personal, este aspecto es extremadamente importante por diferenciador con otras corrientes poéticas como el culturalismo en sus cuatro estadios. *Observación: esta propuesta no pertenece a ninguno de esas cuatro vías culturalistas.
Está claro que otros autores han vislumbrado este quehacer poético en algunos fragmentos, casi en algún poema, en alguna estructuración libresca, en algún aspecto formal. Un primer ejemplo lo tenemos en las glosas medievales. La intrapoesía, la poesía del otro o de la lectura, se manifiesta como una actualización de ese glosar.
Para José Emilio Pacheco los textos no poseen amo. La importancia no está en el autor, porque “este que tan solo transcribe lo que otros ya han escrito. Esta apreciación apunta hacia un enmascaramiento infinito entre autores y textos.”
Este tipo de escritura es la construcción de una voz, del origen de la escritura: la lectura.
Poema: Proyecto de lecturas. Testimonio y análisis.
Un ejemplo de esta propuesta del inédito Inclinación al envés:
Abejarucos en el Cano
Hay un poso de Goofus Bird debajo de los abejarucos. La leyenda murmulla: Jorge Luis Borges, Claudio Elanio, Él, Plinio el Viejo, Mamá. Su vuelo diferente a los demás volátiles:
su vuelo de reata,
el no proyecto-pájaro,
su nido-túnel en sus siete pies
¿de hondura bautizada?
¿por el calor de pluma
al frente, al aire?
Y entrada en fuga
y cortesano adiós,
y regreso al aire,
a coronarse siempre.
La lupa filosófica del verde, el azul, el turquesa, el siena, el oro: ¡Plumón tan de su círculo! En la luz rota vuelves a afirmar tu cara con las tácticas de la Beutifull people, (¿esbeltez y minucia cromática?) Los científicos vician vuestros nombres:
trepadora,
dañina,
comedora de abejas,
y tú respondes: -¿Hombre, ya no nazcas!
desde el borde de ti , desde el borde de ser otro prisma más alto.
Es verano de calma y casa en silencio y vuelves a emigrarle,
a devolverle
el lápiz, la cometa,
la bici con plumón y serpentina.
Julio César Galán (Cáceres, 1978) es actualmente lector en la Universidad de Argel, director de la Asociación de Investigación Teatral y director de la revista de teatro Dioniso. Ha escrito los ibros de poesía "El ocaso de la aurora" (Madrid, 2004), "Tres veces luz" (Barcelona, 2007) y "Gajo de sol" (Cáceres, 2009). Bajo el heterónimo de Luis Yarza ha publicado también "¿Baile de cerezas o polen germinando?" (Tenerife, 2010), y con el eterónimo de Pablo Gaudet "Márgenes" (Valencia, 2011). También ha publicado algunos artículos y poemas en revistas como Cuadernos Hispanoamericanos, Turia, Alga, Extramuros, Ínsula o Cuadernos del Matemático, así como algunas piezas breves de teatro, como "Eureka", premio de teatro Platea 2005. Es editor del blog Los reales ausentes.
Como Sikong Tu dijera en una carta del siglo IX, el punto de partida de una tradición crítica donde la propia crítica es literatura a la vez: “…que sea próxima sin ser superficial, y se expanda a lo lejos sin límite: sólo entonces se puede hablar de excelencia más allá de la resonancia”.
Remake 1: Una tradición poética en la cual la propia crítica es poesía al mismo tiempo.
Poesía de la lectura. Poesía de la otredad. El distanciamiento, el reflejo de lo personal mediante la transformación de lo leído en poesía. Fusión de crítica o ensayo y poesía.
Remake 2: Esta poesía se manifiesta como una comunidad de lectores, una enorme glosa interactiva, una expansión de nuestras lecturas.
“Mis dioses están en la tierra, no en otro lado”. Julio Cortazar.
La inserción de notas a pie de página en el poema es necesaria, en algunos casos, para esta intrapoesía, para indicar su referencia a un aspecto determinado del poema. Hacer una historia visible del poemario. Escritura de grado cero.
Denominaciones: Preferible: Poesía de la lectura o Poesía de la otredad. Aunque intrapoesía es el término más adecuado a nuestras intenciones por el ajuste del prefijo intra.
Remake 3: De la post-poesía se saca su gusto por el canibalismo literario, del transrealismo poético su inclinación hacia la conjunción de tiempos y espacios.
Apunte de vuelta: Poemario=Superposición de libros, pirámide de significados: ¿el sentido objetivo? Aproximar la poesía ¿a lo objetivo?
Cada libro de poemas debe ser una obra en marcha: reescritura continua, escritura mudable. En cada edad el poema tiene su propio rostro.
Si entendemos la poesía como una transposición de una crítica literaria, como un análisis de libros, como un acto de lectura, llegamos al poema-ensayo.
Este tipo de poetización se basa en la abstracción sensitiva o intuitiva, esto no significa caer en el oscurantismo, se pretende una línea reflexiva y lírica.
La crítica como imposibilidad analítica objetiva, es decir, convertida y entendida como ficción, se compromete a pasar al plano de la estética.
Remake (inversos): Convirtamos la tesis en síntesis.
“La crítica legítima tiene que adelantarse a las obras que ella critica: prácticamente tiene que inventar las obras que sea capaz de criticar. Y si es lo suficientemente productiva, a buen seguro habrá compositores que escriban tales obras" T. W. Adorno.
En este punto podemos aducir que nuestra pretensión se asienta en que la poesía se convierta en la invención de la obra que se analiza.
Primero la crítica y después el poema. Fusión y reescritura de ambas.
Antecedentes ejemplares y próximos a esta propuesta poética: “Advertencia al lector” o algunos poemas de “Also Sprach Huidobro” como “¿Qué diremos de él hoy 10 de enero de 1993?” “El galán absoluto según propia declaración” de Nicanor Parra, Hugo Mujica en Flechas en la niebla y Siempre después del viento, Carlos Marzal dentro de sus Metales pesados, Ricardo Defarges desde “Las fresas salvajes (Ingmar Bergman)” en Muere al nacer el día o Azorín (“Carrera, carrera”), Diego Jesús Jiménez en su “Homenaje a Lorca” o el prólogo en verso, entre muchos de sus poemas, de Carta entera de Luis Rosales, entre otros autores.
“La poesía no es un dejar huir la emoción sino una huida de la emoción; no es la expresión de la personalidad sino una huida de la personalidad.” T.S.Eliot.
Remake 4: Esta poesía crítica, esta intrapoesía, esta poesía de la lectura, expresa la función poética del pensamiento.
-Ponga en su batidora: un poco de culturalismo, algo de metapoesía, unos granos de poesía didascálica o poesía didáctica-filosófica, según se mire, análisis textuales, cinematográficos, históricos, etc, y se acercará al poema-ensayo.
En cuanto a crítica y ensayista:
La crítica como creación literaria, George Steiner, El siglo de Sartre, de Bernard-Henry Lévi, Michel Onfray en Teoría del cuerpo enamorado. Por una erótica solar, Octavio Paz en algunas pasajes de Signos en rotación, El arco y la lira, La otra voz, José Ángel Valente en Ensayos de Galaxia Gutenberg. Los libros de Lévy y Onfray son los dos mejores ejemplos.
Vicente Luis Mora en críticas como la de Fósforo astillado de Juan Andrés García Román; Marcos Antonio Núñez, Juan Manuel de Prada y Alvy Singer en algunas críticas cinéfilas.
Un deseo: recree y reviva la intuición y la emoción textual del autor en sus poemas. No su emoción, con esta propuesta poética nos distanciamos de nuestros sentimientos, de nuestras sensaciones identitarias. Estas proceden de la lectura, del cine o de la música. La vida propia en lejanía. La distancia del yo (arma de la poética) para no verlo morir.
El poema como la crítica literaria tiene que ser “un error sistémico que genera nuevas dimensiones de acierto”. El poema crítico: “selección válida para definir lo imprescindible de un libro”. (A través de Vicente Luis Mora).
Hacer que lo natural nos resulte raro y que lo extraño nos sea familiar.
Consiguió formar su propia identidad en el espejo de los autores que él interrogaba.
Desde este punto de vista, el poema es un ensayo sensitivo, es una “estructura lógica, donde la lógica se pone a cantar”.
Este tipo de poesía es una fusión de lo poético y lo argumentativo, pero sin privilegiar una de ellas.
“Preferir lo imposible verosímil a lo posible increíble”. ¿Aristóteles como lazo entre este tipo de creación poética y la heteronimia?
Propósito: lúdico-literario.
Una poesía alimentada por el dialogismo y la voluntad de interpretación.
Esta invitación: didáctica, explicativa, y, hasta cierto punto, perifrásica.
La creación poética puede ser una polémica de ausencias. Cortazar nos guiña un ojo.
Ella es el resultado de un encuentro cultural, que se realiza casi siempre por un contacto directo del autor (o refundidor).
«Abandonemos de una vez el amoroso cultivo de nuestras señas de identidad.» J. Goytisolo.
«invertir / el proceso creador; no de la emoción al poema, / sino al contrario». Guillermo Carnero.
Hacer del poema leído, de la película, cuadro, escultura vista o de la canción escuchada, un poema nuevo, una nueva crítica.
Esta manera de crear supone una variante de la heteronimia, puramente textual, de despojamiento, de testigo de otra creación, de despersonalizarse para ser la obra ajena, para dar a la creación artística sobre la que reflexionamos otra dimensión sonora.
La desvinculacion del ≪yo≫ autoral para convertirnos en el ≪tu≫ textual.
Acercarse al texto tanto en posición de crítico como en la de poeta. Que el resultado de nuestro trabajo dé lugar a un texto nuevo, en una traducción creativa de su significado y su sentido (desmontando a E. Pound).
El escritor no debe hacer alusión a su sentir personal, este aspecto es extremadamente importante por diferenciador con otras corrientes poéticas como el culturalismo en sus cuatro estadios. *Observación: esta propuesta no pertenece a ninguno de esas cuatro vías culturalistas.
Está claro que otros autores han vislumbrado este quehacer poético en algunos fragmentos, casi en algún poema, en alguna estructuración libresca, en algún aspecto formal. Un primer ejemplo lo tenemos en las glosas medievales. La intrapoesía, la poesía del otro o de la lectura, se manifiesta como una actualización de ese glosar.
Para José Emilio Pacheco los textos no poseen amo. La importancia no está en el autor, porque “este que tan solo transcribe lo que otros ya han escrito. Esta apreciación apunta hacia un enmascaramiento infinito entre autores y textos.”
Este tipo de escritura es la construcción de una voz, del origen de la escritura: la lectura.
Poema: Proyecto de lecturas. Testimonio y análisis.
Un ejemplo de esta propuesta del inédito Inclinación al envés:
Abejarucos en el Cano
Hay un poso de Goofus Bird debajo de los abejarucos. La leyenda murmulla: Jorge Luis Borges, Claudio Elanio, Él, Plinio el Viejo, Mamá. Su vuelo diferente a los demás volátiles:
su vuelo de reata,
el no proyecto-pájaro,
su nido-túnel en sus siete pies
¿de hondura bautizada?
¿por el calor de pluma
al frente, al aire?
Y entrada en fuga
y cortesano adiós,
y regreso al aire,
a coronarse siempre.
La lupa filosófica del verde, el azul, el turquesa, el siena, el oro: ¡Plumón tan de su círculo! En la luz rota vuelves a afirmar tu cara con las tácticas de la Beutifull people, (¿esbeltez y minucia cromática?) Los científicos vician vuestros nombres:
trepadora,
dañina,
comedora de abejas,
y tú respondes: -¿Hombre, ya no nazcas!
desde el borde de ti , desde el borde de ser otro prisma más alto.
Es verano de calma y casa en silencio y vuelves a emigrarle,
a devolverle
el lápiz, la cometa,
la bici con plumón y serpentina.
Julio César Galán (Cáceres, 1978) es actualmente lector en la Universidad de Argel, director de la Asociación de Investigación Teatral y director de la revista de teatro Dioniso. Ha escrito los ibros de poesía "El ocaso de la aurora" (Madrid, 2004), "Tres veces luz" (Barcelona, 2007) y "Gajo de sol" (Cáceres, 2009). Bajo el heterónimo de Luis Yarza ha publicado también "¿Baile de cerezas o polen germinando?" (Tenerife, 2010), y con el eterónimo de Pablo Gaudet "Márgenes" (Valencia, 2011). También ha publicado algunos artículos y poemas en revistas como Cuadernos Hispanoamericanos, Turia, Alga, Extramuros, Ínsula o Cuadernos del Matemático, así como algunas piezas breves de teatro, como "Eureka", premio de teatro Platea 2005. Es editor del blog Los reales ausentes.