
Hay una campana en la puerta de su casa que desde allí nos llama. No es una metáfora, pero a la vez lo es. En nuestra conversación, con el mismo énfasis de siempre, Jesús Martín habla de la comunicación y señala lo que nos queda por hacer a los comunicadores desde Latinoamérica. Le comparto que en Rosario, él es una especie de estrella de rock y hasta hay un centro cultural que cita su obra en sus manteles. Fue para mí muy emocionante compartir esa tarde en Bogotá. Y agradecida siempre por su campana.
