Escribe Antonio Piñero
Pregunta:
¿Cómo Judas Iscariote que era avaro de dinero permaneció tanto tiempo en tan pobre compañía en compañía de Jesús?
¿Por qué precisamente tenía que ser Judas, y no en ninguno de los demás que andaban con Jesús?
RESPUESTA:
Sus preguntas me desconciertan, porque no puedo responderlas adecuadamente, y creo que nadie pueda tampoco responderlas porque los textos antiguos, nueestras fuentes, nada dicen al respecto. Las antiguas biografías no se ocupaban de esos rasgos psicológicos. Eran mucho más escuetas. Además, lo de que era “avaro” es una interpretación deductiva muy común sobre todo del Evangelio de Juan (13,29). Pero estrictamente tampoco lo sabemos. Toda la figura de Judas estuvo sujeta a una gran elaboración mítica, de modo que en verdad poco podemos saber cómo fue con seguridad este personaje y menos aún cómo murió, ya que su trágico final está dibujado bien con rasgos del ahorcamiento del traidor Ajitófel en el Antiguo Testamento (traidor a David, que se ahorca: 2 Samuel 17,23: vea, si le es posible la obra colectiva, editada por mí “La verdadera historia de la pasión”, de EDAF, Madrid, hacia 2010) o bien con los de la muerte de otros “asesinos” célebres, como Antíoco IV Epífanes, el rey que quiso helenizar a la fuerza a los judíos y provocó el levantamiento de los Macabeos, a quien también le estallaron las entrañas.
¿Por qué él? Tampoco lo sabemos. De nuevo el Evangelio de Juan dice que “porque Satanás se lo inspiró, entrando en su interior (Jn 13,2).
Pregunta:
Es claro, a partir de lo expuesto en su libro “Los Cristianismos Derrotados” y algunos vídeos en los que usted aparece, que el cristianismo de hoy es fruto del cristianismo paulino. A partir de ello, me ha surgido una duda y es la siguiente: si Jesús no es el fundador del cristianismo, por lo tanto no instituyó la Eucaristía y menos el sacerdocio ¿Cómo se puede entender el origen del sacerdocio, tal como se ve en la Iglesia Católica?
RESPUESTA:
El sacerdocio es una continuación de los presbíteros, o ancianos (institución muy judía que fue conti nuada por os judeocristianos), que acabó gobernando el grupo de seguidores de Jesús, junto con el obispo monárquico (institución más bien griega) en vez de los carismáticos maestros y profetas. Los presbíteros se hicieron cargo de la dirección de las reuniones dominicales, y con ellas de dirigir la celebración de la “Cena del Señor”, entendida al modo paulino. Y como la institución de la eucaristía es una interpretación paulina (lea 1 Corintios 11,23-27), con un fuerte componente mítico-simbólico de unión con el Señor, no es nada extraño que pasados los años, cientos ciertamente, se fueran convirtiendo en lo que son: ante todo administradores del “misterio” de la eucaristía. Era solo cuestión de tiempo.
Pregunta complementaria:
Me interesaría saber si sobre el tema del sacerdocio y los presbíteros encuentro documentos o libros que me permitan profundizar un poco más. Agradezco su ayuda.
RESPUESTA:
El estudio detallado de este tema sobrepasa el ámbito temporal de mi trabajo siglos I a. C. y siglos I y II d. C.
Le recomiendo que vaya a una buena Biblioteca y lea un buen Diccionario de teología. Busque ahí "sacerdocio" y similares y luego consulte también una “Historia de la Iglesia” (por ejemplo la de Sotomayor- Fernández Ubiña-Peinado, etc., en la Editorial Trotta; entre, por favor, en su página web.
Pregunta:
Se que es un experto en religiones y por eso contacto con usted para hacerle una pregunta sobre religión. Sabemos que una blasfemia es una palabra o expresión injuriosa que se dice contra Dios o una ofensa con actos impíos. ¿Una blasfemia también se considera una risa contra Dios por mas que no acompañe la palabra? Por ejemplo, las risas de Sara en Génesis 18:12. Sara no dijo nada contra Dios, pero rio, ¿blasfemó al reír? Muchas gracias.
RESPUESTA:
Como se trata de un caso judío, que opera con conceptos judíos. Y el ejemplo que usted pone es muy claro. Le diría que en la jurisprudencia religiosa judía se exige para condenar a alguien por blasfemia se exige que el acusado haya pronunciado expresamente el nombre de Yahvé y formule también una blasfemia explícita. Por tanto, reírse no es blasfemia, sino una notable desconsideración para con Dios. Y era así, tan rigurosas las condiciones, porque la pena era de muerte.
Pregunta:
También tenía otra pregunta que se me olvidó hacer, ¿El Espíritu Santo está en El Cielo o dentro de los que le aceptan? Gracias
RESPUESTA:
Según la doctrina católica, que algunos consideran incoada en el Nuevo Testamento, el Espíritu santo, no puede separarse de Dios, es “Dios hacia afuera”, “Dios como espíritu”, y está no solo en el cielo sino en todas partes. La inhabitación de Dios en el creyente es un puro acto simbólico-místico. Se lo tiene usted que imaginar como quiera porque en el Nuevo Testamento no se dice en ninguna parte cómo funciona.
Saludos cordiales de Antonio Piñero
Universidad Complutense de Madrid
www.antoniopinero.com
Pregunta:
¿Cómo Judas Iscariote que era avaro de dinero permaneció tanto tiempo en tan pobre compañía en compañía de Jesús?
¿Por qué precisamente tenía que ser Judas, y no en ninguno de los demás que andaban con Jesús?
RESPUESTA:
Sus preguntas me desconciertan, porque no puedo responderlas adecuadamente, y creo que nadie pueda tampoco responderlas porque los textos antiguos, nueestras fuentes, nada dicen al respecto. Las antiguas biografías no se ocupaban de esos rasgos psicológicos. Eran mucho más escuetas. Además, lo de que era “avaro” es una interpretación deductiva muy común sobre todo del Evangelio de Juan (13,29). Pero estrictamente tampoco lo sabemos. Toda la figura de Judas estuvo sujeta a una gran elaboración mítica, de modo que en verdad poco podemos saber cómo fue con seguridad este personaje y menos aún cómo murió, ya que su trágico final está dibujado bien con rasgos del ahorcamiento del traidor Ajitófel en el Antiguo Testamento (traidor a David, que se ahorca: 2 Samuel 17,23: vea, si le es posible la obra colectiva, editada por mí “La verdadera historia de la pasión”, de EDAF, Madrid, hacia 2010) o bien con los de la muerte de otros “asesinos” célebres, como Antíoco IV Epífanes, el rey que quiso helenizar a la fuerza a los judíos y provocó el levantamiento de los Macabeos, a quien también le estallaron las entrañas.
¿Por qué él? Tampoco lo sabemos. De nuevo el Evangelio de Juan dice que “porque Satanás se lo inspiró, entrando en su interior (Jn 13,2).
Pregunta:
Es claro, a partir de lo expuesto en su libro “Los Cristianismos Derrotados” y algunos vídeos en los que usted aparece, que el cristianismo de hoy es fruto del cristianismo paulino. A partir de ello, me ha surgido una duda y es la siguiente: si Jesús no es el fundador del cristianismo, por lo tanto no instituyó la Eucaristía y menos el sacerdocio ¿Cómo se puede entender el origen del sacerdocio, tal como se ve en la Iglesia Católica?
RESPUESTA:
El sacerdocio es una continuación de los presbíteros, o ancianos (institución muy judía que fue conti nuada por os judeocristianos), que acabó gobernando el grupo de seguidores de Jesús, junto con el obispo monárquico (institución más bien griega) en vez de los carismáticos maestros y profetas. Los presbíteros se hicieron cargo de la dirección de las reuniones dominicales, y con ellas de dirigir la celebración de la “Cena del Señor”, entendida al modo paulino. Y como la institución de la eucaristía es una interpretación paulina (lea 1 Corintios 11,23-27), con un fuerte componente mítico-simbólico de unión con el Señor, no es nada extraño que pasados los años, cientos ciertamente, se fueran convirtiendo en lo que son: ante todo administradores del “misterio” de la eucaristía. Era solo cuestión de tiempo.
Pregunta complementaria:
Me interesaría saber si sobre el tema del sacerdocio y los presbíteros encuentro documentos o libros que me permitan profundizar un poco más. Agradezco su ayuda.
RESPUESTA:
El estudio detallado de este tema sobrepasa el ámbito temporal de mi trabajo siglos I a. C. y siglos I y II d. C.
Le recomiendo que vaya a una buena Biblioteca y lea un buen Diccionario de teología. Busque ahí "sacerdocio" y similares y luego consulte también una “Historia de la Iglesia” (por ejemplo la de Sotomayor- Fernández Ubiña-Peinado, etc., en la Editorial Trotta; entre, por favor, en su página web.
Pregunta:
Se que es un experto en religiones y por eso contacto con usted para hacerle una pregunta sobre religión. Sabemos que una blasfemia es una palabra o expresión injuriosa que se dice contra Dios o una ofensa con actos impíos. ¿Una blasfemia también se considera una risa contra Dios por mas que no acompañe la palabra? Por ejemplo, las risas de Sara en Génesis 18:12. Sara no dijo nada contra Dios, pero rio, ¿blasfemó al reír? Muchas gracias.
RESPUESTA:
Como se trata de un caso judío, que opera con conceptos judíos. Y el ejemplo que usted pone es muy claro. Le diría que en la jurisprudencia religiosa judía se exige para condenar a alguien por blasfemia se exige que el acusado haya pronunciado expresamente el nombre de Yahvé y formule también una blasfemia explícita. Por tanto, reírse no es blasfemia, sino una notable desconsideración para con Dios. Y era así, tan rigurosas las condiciones, porque la pena era de muerte.
Pregunta:
También tenía otra pregunta que se me olvidó hacer, ¿El Espíritu Santo está en El Cielo o dentro de los que le aceptan? Gracias
RESPUESTA:
Según la doctrina católica, que algunos consideran incoada en el Nuevo Testamento, el Espíritu santo, no puede separarse de Dios, es “Dios hacia afuera”, “Dios como espíritu”, y está no solo en el cielo sino en todas partes. La inhabitación de Dios en el creyente es un puro acto simbólico-místico. Se lo tiene usted que imaginar como quiera porque en el Nuevo Testamento no se dice en ninguna parte cómo funciona.
Saludos cordiales de Antonio Piñero
Universidad Complutense de Madrid
www.antoniopinero.com