Bitácora

La larga marcha europea hacia la Sociedad del Conocimiento (y II)

Redactado por Fernando Davara el Viernes, 6 de Abril 2007 a las 20:37 | Viernes, 6 de Abril 2007

Pensar y obrar, obrar y pensar, es la suma de toda sabiduria.
Goethe


España ante la Estrategia de Lisboa revisada

Como señalaba en la primera parte de este artículo uno de los elementos fundamentales de la Estrategia de Lisboa Revisada, además del Programa Comunitario, son los denominados Programas Nacionales de Reformas (PNR) que hasta el momento han sido bien recibidos por los Estados Miembros como lo muestra el hecho de que antes de que pasara un año desde su adopción todos habían elaborado ya sus programas nacionales y nombrado sus responsables políticos, con la excepción de Francia, que si bien presentó su PNR, no nombró a su representante.

España no ha sido ajena a este interés comunitario y así en junio de 2005 constituyó la Unidad Permanente de Lisboa, en la Oficina Económica del Presidente del Gobierno, y en octubre del mismo año presentó a la Comisión Europea el Programa Nacional de Reformas español, nombrando además un Coordinador Nacional del Programa.

Este PNR español se articula alrededor de dos grandes objetivos:

• Alcanzar en 2010 la plena convergencia en renta per cápita con la Unión Europea a 25
• Superar en 2010 la tasa de empleo de la UE (66%)

que responden a las 24 líneas directrices integradas que recoge la estrategia de Lisboa revisada.

Para ello el PNR español se construye en torno a siete ejes fundamentales;

• EJE 1: Refuerzo de la Estabilidad Macroeconómica y Presupuestaria.
• EJE 2: Plan Estratégico de Infraestructuras y Transporte (PEIT) y Programa de Actuaciones para la Gestión y Utilización del Agua (AGUA).
• EJE 3: Aumento y mejora del capital humano.
• EJE 4: Estrategia de I+D+i (INGENIO 2010).
• EJE 5: Más competencia, mejor regulación, eficiencia de las Administraciones Públicas y competitividad.
• EJE 6: Mercado de Trabajo y Diálogo Social.
• EJE 7: Plan de Fomento Empresarial.

I+D+i; Programa Ingenio 2010

En lo que se refiere a Investigación, Desarrollo e Innovación, es el eje número 4 donde se acomete la mayor parte de la estrategia de I+D+i mediante un programa específico, denominado “Ingenio 2010" con el compromiso de involucrar al Estado, Empresas, Universidades y otros Organismos Públicos de Investigación en un esfuerzo por impulsar el desarrollo científico y tecnológico en España y tratar de alcanzar en este dominio el nivel adecuado al peso económico y político de España en Europa.

Desde entonces ya se han desarrollado, o están próximas a lanzarse, acciones como la implantación generalizada de la factura electrónica, créditos blandos a las Pymes para financiar sus inversiones en tecnología e innovación, financiación de proyectos de formación TIC de los trabajadores, “trámite único” (no requiriendo al ciudadano información que ya consta en la administración), Documento de Identidad electrónico, o la creación de una plataforma de servicios telemáticos unificada para pequeñas administraciones provinciales y locales.

Los objetivos del Programa Ingenio 2010 se centran en:

• Alcanzar el 2% del PIB en inversión en I+D en 2010 (y el 1,5% en 2007)
• Llegar al 55% de la contribución del sector privado en dicha inversión I+D en 2010
• Llegar al 0,9% de la contribución publica en inversión en I+D sobre el PIB en 2010
• Alcanzar una inserción mínima de 1.300 doctores por año en el sector privado a partir de 2010
• Incrementar las cifras de creación de empresas tecnológicas surgidas de la investigación pública hasta un mínimo de 130 nuevas empresas al año en 2010.
• Incremento de nuevas empresas de base tecnológica creadas a partir de iniciativas del sector público (Spin-offs)
• Alcanzar en 2010 la media de la UE (7%) en el porcentaje del PIB destinado a las Tecnologías de la Información y Comunicaciones (TIC).

Para conseguir estos objetivos se incorporan algunas medidas instrumentales entre las que aparece el denominado Plan Avanz@, en relación directa con la convergencia en los indicadores medios de la Sociedad de la Información.

Este Plan, aprobado por el Consejo de Ministros español del 4 de noviembre de 2005, presenta un objetivo fundamental: conseguir que el volumen de la actividad económica relacionada con las TIC se sitúe cerca del 7% del PIB en el año 2010. Se articula en varias líneas estratégicas dedicadas a Ciudadanos, Pymes, Administración electrónica y Educación, que pretenden incorporar a la Sociedad de la Información a los ciudadanos, empresas y administraciones públicas.

Conclusiones

Prometía en la primera parte de este artículo hacer una valoración de la evolución y expectativas de la Estrategia de Lisboa y este será el motivo de estas conclusiones.

Pero reconozco que es difícil tratar de ser objetivo pues no puedo obviar mis impresiones personales que, como español y europeo, se ven directamente impactadas por este y otros muchos temas similares, de fuerte y directa incidencia en nuestra sociedad, actual y futura. En consecuencia, para evitar subjetividades, trataré de hacer abstracción de ellas y presentaré una impresión personal lo mas aséptica y sintetizada posible.

La Estrategia de Lisboa, tanto la primitiva como la revisada, constituye para la Unión Europea y sus Estados miembros una propuesta práctica para hacer frente a los principales retos del futuro económico e industrial de Europa entre los que destacaría cual es el papel a representar en un mundo global, cuales deben ser las políticas de crecimiento y empleo, que futuro se trata de asegurar a su juventud, etc.

Pero esta praxis está condicionada por la propia esencia de la Unión, en particular por las limitaciones a las competencias comunitarias impuestas por la soberanía de los Estados. Esta fue, a mi juicio, una de las causas de los limitados avances que se alcanzaron en la primera versión (Lisboa 2000) que además había mostrado un excesivo optimismo al pretender hacer de la economía europea las mas dinámica y competitiva del mundo.

Cuando en 2004 se llevó a cabo la primera evaluación pudo comprobarse que el balance era poco satisfactorio pues, junto a progresos indudables, aparecían retrasos evidentes, como por ejemplo el aumento del “hueco” que existe entre la capacidad de crecimiento de Europa y la de sus principales competidores mundiales.

La estrategia revisada cambia el enfoque reorientando las prioridades hacia el crecimiento y el empleo, basándose en el capital humano, el conocimiento y la innovación. Pero esta vez se trata de comprometer no solo a la Unión sino también a todos los posibles cooperantes nacionales, incluidos gobiernos, parlamentos y actores regionales y locales, así como a la sociedad civil.

De esta forma, con una visión mas pragmática, reconociendo implícitamente que en realidad quienes están implicadas en la estrategia son las propias políticas económicas nacionales y locales, se pretende movilizar a todos para desarrollar una estrategia global, adoptando reformas estructurales y políticas económicas comunes en torno a un objetivo único de crecimiento y empleo

Esta puede ser una explicación coherente de la rápida respuesta de todos los Estados miembros para adoptar la estrategia, al poner en marcha sus Programas Nacionales de Reforma y nombrar sus responsables políticos de alto nivel.

En lo que respecta a los temas de referencia de este blog, quiero subrayar que en la estrategia revisada no se han olvidado de los elementos necesarios para continuar caminando hacia la sociedad del conocimiento. Entre ellos destaco el interés en aumentar y mejorar la inversión en I+D, en particular en el sector privado, potenciar el papel y utilización de las TIC y fomentar la innovación. En suma, organizar el espacio europeo del conocimiento ampliando la sociedad de la información.

Finalizo con un mensaje de esperanza; si esta revisión estratégica es capaz de aumentar la cohesión social y permite que todos los Estados de la Unión puedan representar su papel en apoyo de una política común de crecimiento y empleo a largo plazo, debemos felicitarnos por ello. El tiempo, como siempre, dará o quitará razones.
Fernando Davara
| Redactado por Fernando Davara el Viernes, 6 de Abril 2007 a las 20:37