Botellas de polietileno. Imagen: Hans. Fuente: Pixabay.
Un equipo combinado de investigadores de la Academia China de Ciencias y la Universidad de California (EE.UU.) ha encontrado una manera de degradar plásticos ordinarios, acumulados como residuos, para producir combustible.
En un artículo publicado en la revista Science Advances, el equipo describe su técnica y sus esperanzas de aplicarla a gran escala.
Los científicos, explica Phys.org, llevan tiempo buscando una buena manera de degradar los plásticos, en particular el polietileno, el tipo más común producido, pero hasta que no han sido capaces de encontrar cómo hacerlo barato y escalable.
En un artículo publicado en la revista Science Advances, el equipo describe su técnica y sus esperanzas de aplicarla a gran escala.
Los científicos, explica Phys.org, llevan tiempo buscando una buena manera de degradar los plásticos, en particular el polietileno, el tipo más común producido, pero hasta que no han sido capaces de encontrar cómo hacerlo barato y escalable.
Barato pero no escalable
El nuevo método consiste en mezclar los plásticos con un catalizador organometálico, hecho mediante la mezcla de moléculas fácilmente disponibles, dopadas con metal iridio. La reacción hace que los enlaces que mantienen el plástico unido se debiliten, lo que permite arrancarlos con mayor facilidad.
Luego, el equipo es capaz de utilizar el material para crear un combustible tipo diésel, que afirman que podría ser utilizado para alimentar vehículos y otros motores. Quemar este combustible, aseguran, es también más limpio que quemar otros.
El equipo afirma que el proceso es barato y no muy difícil, aunque todavía no está claro si es escalable. La proporción de plástico a catalizador es actualmente de aproximadamente 30 a 1, que es bien poco para los fines comerciales. Su objetivo es de 10.000 a 1.
El equipo también está buscando algo para usar como parte del catalizador en lugar de iridio, ya que éste es difícil de conseguir en grandes cantidades y demasiado caro.
El nuevo método consiste en mezclar los plásticos con un catalizador organometálico, hecho mediante la mezcla de moléculas fácilmente disponibles, dopadas con metal iridio. La reacción hace que los enlaces que mantienen el plástico unido se debiliten, lo que permite arrancarlos con mayor facilidad.
Luego, el equipo es capaz de utilizar el material para crear un combustible tipo diésel, que afirman que podría ser utilizado para alimentar vehículos y otros motores. Quemar este combustible, aseguran, es también más limpio que quemar otros.
El equipo afirma que el proceso es barato y no muy difícil, aunque todavía no está claro si es escalable. La proporción de plástico a catalizador es actualmente de aproximadamente 30 a 1, que es bien poco para los fines comerciales. Su objetivo es de 10.000 a 1.
El equipo también está buscando algo para usar como parte del catalizador en lugar de iridio, ya que éste es difícil de conseguir en grandes cantidades y demasiado caro.
Referencia bibliográfica:
X. Jia et al.: Efficient and selective degradation of polyethylenes into liquid fuels and waxes under mild conditions. Science Advances (2016). DOI: 10.1126/sciadv.1501591.
X. Jia et al.: Efficient and selective degradation of polyethylenes into liquid fuels and waxes under mild conditions. Science Advances (2016). DOI: 10.1126/sciadv.1501591.