Un modelo de entrenamiento de alta intensidad y corta duración mejora el sistema energético aeróbico y anaeróbico. Imagen: Christopher Johnson.
“Con nuestro nuevo sistema de entrenamiento, la mejora de la capacidad física de los jugadores equivale a tener uno más en el campo. Nosotros lo llamamos ‘el señor oxígeno”, ha declarado a SINC Jan Helgerud, profesor de la Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología (NTNU), y autor principal de un nuevo método de preparación física que se ha testado con deportistas de élite.
El programa consiste en un calentamiento de 10 minutos seguido de ejercicios aeróbicos por intervalos, un descanso de 15 minutos y un entrenamiento de fuerza máxima. “Este último ejercicio consiste en la repetición de cuatro series de media sentadilla –articulación de la rodilla en un ángulo de 90º– utilizando una barra y pesos. Los jugadores tienen un descanso de tres minutos entre las series”, explica el investigador.
El entrenamiento con 21 futbolistas profesionales duró una hora y se repitió dos veces semanales por las mañanas, durante ocho semanas, en pretemporada. Además, el programa se incluyó en una semana normal de temporada, con seis sesiones de una hora y media, seguidas de un partidillo en el que se hizo énfasis en las acciones técnicas y tácticas.
Mejoras notables
“Estudios previos sobre este tipo de entrenamiento carecían de pruebas directas con equipos de fútbol de élite a nivel internacional. Además, los entrenadores de este nivel a menudo tienen miedo de que estos períodos de entrenamiento intensivo puedan causar a sus jugadores lesiones, fatiga y pérdida de la capacidad de entrenamiento”, apunta el experto.
El programa consiste en un calentamiento de 10 minutos seguido de ejercicios aeróbicos por intervalos, un descanso de 15 minutos y un entrenamiento de fuerza máxima. “Este último ejercicio consiste en la repetición de cuatro series de media sentadilla –articulación de la rodilla en un ángulo de 90º– utilizando una barra y pesos. Los jugadores tienen un descanso de tres minutos entre las series”, explica el investigador.
El entrenamiento con 21 futbolistas profesionales duró una hora y se repitió dos veces semanales por las mañanas, durante ocho semanas, en pretemporada. Además, el programa se incluyó en una semana normal de temporada, con seis sesiones de una hora y media, seguidas de un partidillo en el que se hizo énfasis en las acciones técnicas y tácticas.
Mejoras notables
“Estudios previos sobre este tipo de entrenamiento carecían de pruebas directas con equipos de fútbol de élite a nivel internacional. Además, los entrenadores de este nivel a menudo tienen miedo de que estos períodos de entrenamiento intensivo puedan causar a sus jugadores lesiones, fatiga y pérdida de la capacidad de entrenamiento”, apunta el experto.
Gil Rodas, del servicio médico del F. C. Barcelona y coautor del estudio, añade: “Que un modelo de entrenamiento de alta intensidad y corta duración puede mejorar ambos sistemas energéticos, aeróbico y anaeróbico, es algo ya ampliamente comprobado, pero no a nivel tan práctico y, concretamente, en futbolistas profesionales”.
Los resultados de la investigación demuestran que, tras este programa, los futbolistas de élite aumentaron el consumo máximo de oxígeno en un 8,6%, fueron capaces de saltar tres centímetros más alto y mejoraron el tiempo de sprint en 0,06 segundos. Por su parte, los fisioterapeutas que intervinieron en el estudio no reportaron ningún efecto secundario negativo durante el periodo de ocho semanas de entrenamiento intensivo.
“Este estudio con futbolistas de élite es necesario porque los entrenadores no están dispuestos a transferir los resultados que se ensayan en equipos de niveles más bajos”, subraya Helgerud.
El programa está diseñado para el entrenamiento físico durante todo el año, no solo para la pretemporada. “Hemos participado directamente en varios equipos que ya lo han incorporado. Sin embargo, nos gustaría verlo aplicado en equipos de todo el mundo. Estamos convencidos de que el método científico es el camino a seguir en el futuro”, indica Helgerud.
Para los autores, queda pendiente estudiar si al aplicar este modelo durante toda la temporada se pueden mantener los beneficios a nivel de rendimiento físico. “Igualmente también hemos puesto en marcha estudios para conocer si disminuye la incidencia de lesiones”, concluye Rodas.
Los resultados de la investigación demuestran que, tras este programa, los futbolistas de élite aumentaron el consumo máximo de oxígeno en un 8,6%, fueron capaces de saltar tres centímetros más alto y mejoraron el tiempo de sprint en 0,06 segundos. Por su parte, los fisioterapeutas que intervinieron en el estudio no reportaron ningún efecto secundario negativo durante el periodo de ocho semanas de entrenamiento intensivo.
“Este estudio con futbolistas de élite es necesario porque los entrenadores no están dispuestos a transferir los resultados que se ensayan en equipos de niveles más bajos”, subraya Helgerud.
El programa está diseñado para el entrenamiento físico durante todo el año, no solo para la pretemporada. “Hemos participado directamente en varios equipos que ya lo han incorporado. Sin embargo, nos gustaría verlo aplicado en equipos de todo el mundo. Estamos convencidos de que el método científico es el camino a seguir en el futuro”, indica Helgerud.
Para los autores, queda pendiente estudiar si al aplicar este modelo durante toda la temporada se pueden mantener los beneficios a nivel de rendimiento físico. “Igualmente también hemos puesto en marcha estudios para conocer si disminuye la incidencia de lesiones”, concluye Rodas.