Imagen: Galina Barskaya. Fuente: PhotoXpress.
Durante los últimos años se ha registrado un notable aumento de parejas que acuden a especialistas para mejorar su relación tras periodos de crisis, malos momentos o simplemente por falta de entendimiento. Procesos terapéuticos dirigidos por un psicólogo en busca de medidas adecuadas para reconstruir la relación o bien finalizarla.
Psicológicos e investigadores son conscientes de las implicaciones que tiene para mantener la buena salud de una relación la forma en que sus miembros hablan y discuten sus problemas. Sin embargo, la falta de herramientas eficientes y fiables para medir elementos destacables en esas conversaciones ha sido un obstáculo para frenar su uso clínico generalizado.
Ahora, un nuevo software podría permitir a los terapeutas de pareja hacer mediciones objetivas de cada comportamiento. Un equipo interdisciplinario con miembros de la Universidad del Sur de California (USC) y la Universidad de Utah, en Estados Unidos, ha desarrollado un algoritmo informático capaz de predecir si la relación de una pareja irá a mejor o peor basándose en el tono de voz con que se hablan.
Para ello, según explica la USC en un comunicado, los investigadores registraron cientos de conversaciones de más de un centenar de parejas tomadas en sesiones de terapia de matrimonio durante más de dos años, haciendo después un seguimiento de su relación durante otros cinco.
Psicológicos e investigadores son conscientes de las implicaciones que tiene para mantener la buena salud de una relación la forma en que sus miembros hablan y discuten sus problemas. Sin embargo, la falta de herramientas eficientes y fiables para medir elementos destacables en esas conversaciones ha sido un obstáculo para frenar su uso clínico generalizado.
Ahora, un nuevo software podría permitir a los terapeutas de pareja hacer mediciones objetivas de cada comportamiento. Un equipo interdisciplinario con miembros de la Universidad del Sur de California (USC) y la Universidad de Utah, en Estados Unidos, ha desarrollado un algoritmo informático capaz de predecir si la relación de una pareja irá a mejor o peor basándose en el tono de voz con que se hablan.
Para ello, según explica la USC en un comunicado, los investigadores registraron cientos de conversaciones de más de un centenar de parejas tomadas en sesiones de terapia de matrimonio durante más de dos años, haciendo después un seguimiento de su relación durante otros cinco.
Procesamiento del habla
El habla constituye la forma más natural de comunicación entre las personas, de ahí el gran interés por desarrollar sistemas informáticos capaces de procesarla y generarla de forma automática. De eso se encarga el procesamiento del habla, que abarca múltiples métodos y técnicas con una doble finalidad. Por una parte, conseguir que los ordenadores comprendan los mensajes pronunciados por los usuarios y viceversa, hacer que la máquina emita mensajes entendibles.
Precisamente una de esas técnicas de procesamiento del habla es la que han utilizado los investigadores para convertir las grabaciones con las conversaciones de las parejas en características acústicas. Eso incluye el tono, la intensidad, las fluctuaciones o el brillo entre otros muchos aspectos, como los trinos en la voz, que pueden indicar momentos de mucha emoción.
"Lo que se dice no es lo único que importa, también cómo se dice”, asegura Md Nasir, doctorando en la USC. La suma de todas esas características acústicas ofrece un proxy del estado comunicativo del sujeto, así como los cambios en ese estado durante una sola terapia o a lo largo de varias sesiones.
Esas características no se analizaron por separado, sino más bien comprobando el impacto de las de un miembro de la pareja sobre el otro durante varias sesiones de terapia. Y es que, como matiza el líder del estudio, Shrikanth Narayanan, “no se trata sólo de estudiar emociones, sino el impacto de las palabras de uno en las emociones del otro”.
Por ello, analizar el comportamiento de una pareja en una sola sesión limita mucho el trabajo. Sin embargo, si se pueden comparar varios momentos en el tiempo, la dinámica de pareja y mirando hacia ambas partes, ayuda a identificar el curso de la relación.
El habla constituye la forma más natural de comunicación entre las personas, de ahí el gran interés por desarrollar sistemas informáticos capaces de procesarla y generarla de forma automática. De eso se encarga el procesamiento del habla, que abarca múltiples métodos y técnicas con una doble finalidad. Por una parte, conseguir que los ordenadores comprendan los mensajes pronunciados por los usuarios y viceversa, hacer que la máquina emita mensajes entendibles.
Precisamente una de esas técnicas de procesamiento del habla es la que han utilizado los investigadores para convertir las grabaciones con las conversaciones de las parejas en características acústicas. Eso incluye el tono, la intensidad, las fluctuaciones o el brillo entre otros muchos aspectos, como los trinos en la voz, que pueden indicar momentos de mucha emoción.
"Lo que se dice no es lo único que importa, también cómo se dice”, asegura Md Nasir, doctorando en la USC. La suma de todas esas características acústicas ofrece un proxy del estado comunicativo del sujeto, así como los cambios en ese estado durante una sola terapia o a lo largo de varias sesiones.
Esas características no se analizaron por separado, sino más bien comprobando el impacto de las de un miembro de la pareja sobre el otro durante varias sesiones de terapia. Y es que, como matiza el líder del estudio, Shrikanth Narayanan, “no se trata sólo de estudiar emociones, sino el impacto de las palabras de uno en las emociones del otro”.
Por ello, analizar el comportamiento de una pareja en una sola sesión limita mucho el trabajo. Sin embargo, si se pueden comparar varios momentos en el tiempo, la dinámica de pareja y mirando hacia ambas partes, ayuda a identificar el curso de la relación.
Gran exactitud
Una vez ajustado el software con las grabaciones de parejas, se puso a prueba con análisis de comportamiento hechos por expertos, que codificaron las cualidades positivas como "aceptación" y las negativas como “culpa”. El equipo detectó que el estudio realizado con las voces en vivo y directo, en lugar de códigos de conducta creados por expertos, ofreció una visión mucho más precisa sobre el futuro de una pareja.
Durante las pruebas, la herramienta funcionó con casi el 79 por ciento de exactitud. De hecho, el algoritmo hizo mejor trabajo pronosticando el éxito matrimonial de parejas con problemas graves que los informes proporcionados por expertos en relaciones tras las sesiones de terapia.
El siguiente reto de los investigadores sería utilizar tanto el lenguaje oral como la comunicación no verbal para mejorar la predicción sobre la eficacia de los tratamientos. Para ello se valdrán del procesamiento de señales de comportamiento, desarrollado por Narayanan para entender computacionalmente el comportamiento humano.
No es la primera vez que se recurre a la informática para resolver temas sentimentales. Un ex ingeniero de la NASA presentó a principios de año Nanaya, una página web que, como publicó Tendencias21, calcula mediante el uso de algoritmos las probabilidades de los usuarios de tener suerte en el amor.
Una vez ajustado el software con las grabaciones de parejas, se puso a prueba con análisis de comportamiento hechos por expertos, que codificaron las cualidades positivas como "aceptación" y las negativas como “culpa”. El equipo detectó que el estudio realizado con las voces en vivo y directo, en lugar de códigos de conducta creados por expertos, ofreció una visión mucho más precisa sobre el futuro de una pareja.
Durante las pruebas, la herramienta funcionó con casi el 79 por ciento de exactitud. De hecho, el algoritmo hizo mejor trabajo pronosticando el éxito matrimonial de parejas con problemas graves que los informes proporcionados por expertos en relaciones tras las sesiones de terapia.
El siguiente reto de los investigadores sería utilizar tanto el lenguaje oral como la comunicación no verbal para mejorar la predicción sobre la eficacia de los tratamientos. Para ello se valdrán del procesamiento de señales de comportamiento, desarrollado por Narayanan para entender computacionalmente el comportamiento humano.
No es la primera vez que se recurre a la informática para resolver temas sentimentales. Un ex ingeniero de la NASA presentó a principios de año Nanaya, una página web que, como publicó Tendencias21, calcula mediante el uso de algoritmos las probabilidades de los usuarios de tener suerte en el amor.