Se implementa la primera red protegida con criptografía cuántica

Concluyen en éxito más de 4 años de investigación en el proyecto SECOQC


La primera red comercial de telecomunicación protegida con tecnologías de criptografía cuántica ha sido presentada en una demostración por responsables del proyecto SECOQC. Fundamentado en los principios de la física cuántica, el sistema desarrollado hace impenetrable el intercambio de datos a cualquier tipo de escucha o intromisión no autorizada. Por César Gutiérrez.


César Gutiérrez
11/10/2008

El proyecto SECOQC (Desarrollo de una Red Global para la Comunicación Segura Basada en la Criptografía Cuántica) de la UE, en el que han trabajado 41 socios de 12 países europeos durante cuatro años y medio, ha concluido en un rotundo éxito: el pasado 8 de octubre se llevó a cabo una demostración en la que por primera vez una red comercial de telecomunicación ha transportado datos protegidos mediante encriptación cuántica, según se informa en un comunicado.

La seguridad en la transmisión de datos a través de una red protegida mediante criptografía cuántica está garantizada por las leyes de la física, concretamente por el principio de incertidumbre de Heissemberg, que define la imposibilidad de observar un sistema sin provocar perturbaciones en el mismo.

Fotones delatores


Básicamente la técnica consiste en el envío de haces de fotones (partículas de luz), la medición de éstas por los agentes legitimados para ello y el subsiguiente post-procesamiento de los datos. Cualquier “fisgón” que intervenga en el proceso dejará inmediatamente en él rastros indelebles, que se traducen en errores detectados por los usuarios legítimos.

Durante la demostración, cada vez que un intruso intentaba husmear una conversación o intercambio de datos los fotones se perturbaban y los detectores de los nodos indicaban un aumento en el rango de error permitido, señalando el ataque, según informa un artículo de la BBC.

La red cuántico-criptográfica implementada para la demostración (a la que están conectadas cinco filiales de Siemens, uno de los socios involucrados en el proyecto) consta de seis nodos y ocho enlaces intermedios, separados por distancias de entre 6 y 82 Km. Siete de esos enlaces operan con estándares comerciales de telecomunicación por fibra óptica, y el restante utiliza un sistema de óptica de espacio libre, a lo largo de una línea de visión entre dos telescopios.

Desventajas superadas

Los enlaces llevan integradas un total de seis tecnologías diferentes de encriptación cuántica, cuyas características técnicas detalladas pueden consultarse en la web del proyecto.

Los dispositivos criptográfico-cuánticos situados en los nodos son sofisticados productos de alto rendimiento, fruto de la investigación y desarrollo llevados a cabo por el proyecto, e interactúan estrechamente con los interfaces estándar en los que están implementados.

Anteriormente, los desarrollos en criptografía cuántica se habían centrado en conexiones punto a punto, entre un solo emisor y un receptor, ofreciendo soluciones actualmente disponibles y que pueden resultar apropiadas para algunas aplicaciones, por ejemplo la conexión de dos centros de datos en un área metropolitana.

Pero en otros escenarios las soluciones criptográfico-cuánticas punto a punto son inadecuadas, dadas las desventajas de este tipo de conexión: la pérdida de fotones en la fibra óptica limita la máxima distancia entre emisor y receptor. También está limitada la máxima velocidad de generación de claves, que es relativamente baja. Además, la comunicación puede ser interrumpida simplemente cortando la fibra o interfiriendo en la línea de visión (en caso de transmisión en espacio libre).

La variedad de trayectorias alternativas entre emisor y receptor hace que esas desventajas estén superadas en una red, donde además más de dos socios pueden obtener claves simultáneamente para el encriptamiento de la comunicación confidecial.

Redireccionamiento cuántico

Esta robusted de la red también fue puesta de manifiesto en la demostración. Cuando un enlace cuántico se vino abajo las conexiones fueron redirigidas automáticamente a través de otros nodos, lo que aseguró a los usuarios una comunicación sin interrupciones.

El Dr. Hannes Huebel, de la Universidad de Viena, explicó la enorme importancia que una red robusta tiene para el desarrollo de sistemas cuántico-criptográficos. “Estamos constantemente en contacto” –declaró– “con bancos y compañías de seguros, y ellos dicen que casi prefieren perder una considerable cantidad de dinero a que el sistema se caiga durante dos horas, porque esto último podría proporcionar mayor daño al banco.”

Por otro lado, el sistema desarrollado proporciona seguridad a largo plazo y se adecua a las más recientes disposiciones legales sobre protección de la información, de modo que él éxito de este proyecto abre a los operadores de telecomunicaciones la posibilidad de desarrollar nuevos servicios y productos basados en la criptografía cuántica.



César Gutiérrez
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