Fuente: Statoil.
La energía eólica entra dentro de esas fuentes de energia renovable que aspira a reducir significatívamente el uso de las térmicas, sin necesidad de recurrir a las, aún a día de hoy, polémicas centrales nucleares.
En algunos paises es común encontrar molinos de viento en tierra, por ejemplo en España, en 2011, está tecnología satisfizo el 11% de la demanda de energía eléctrica.
En el mar, Siemens lleva más de 20 años trabajando con gigantescos molinos de viento construidos sobre el lecho marino. El más antiguo de ellos funciona robustamente desde 1991. Hablamos de molinos con rotores de un diámetro de 120-130 metros, mientras que el caso de tecnología terrestre tradicional podríamos estar hablando de entre 70 y 80 metros.
Además, en los últimos años se viene trabajando en una nueva aproximación que plantea la instalación de estructuras flotantes en lugar de construidas sobre el fondo del mar.
Esta aproximación abarataría los costes de instalación, además de abrir la posibilidad de instalar granjas en aguas más profundas, donde muchas veces el viento es más fuerte.
La empresa noruega Statoil lleva años experimentado con proyectos piloto de este tipo, y ahora aspira a construir una granja eólica flotante que estaría funcionando en 2017 y que sería capaz de abastecer a 20.000 hogares.
En algunos paises es común encontrar molinos de viento en tierra, por ejemplo en España, en 2011, está tecnología satisfizo el 11% de la demanda de energía eléctrica.
En el mar, Siemens lleva más de 20 años trabajando con gigantescos molinos de viento construidos sobre el lecho marino. El más antiguo de ellos funciona robustamente desde 1991. Hablamos de molinos con rotores de un diámetro de 120-130 metros, mientras que el caso de tecnología terrestre tradicional podríamos estar hablando de entre 70 y 80 metros.
Además, en los últimos años se viene trabajando en una nueva aproximación que plantea la instalación de estructuras flotantes en lugar de construidas sobre el fondo del mar.
Esta aproximación abarataría los costes de instalación, además de abrir la posibilidad de instalar granjas en aguas más profundas, donde muchas veces el viento es más fuerte.
La empresa noruega Statoil lleva años experimentado con proyectos piloto de este tipo, y ahora aspira a construir una granja eólica flotante que estaría funcionando en 2017 y que sería capaz de abastecer a 20.000 hogares.
Viabilidad económica
Estudios hablan de un coste de construcción de 4.200 millones de euros para instalaciones construidas sobre el fondo del mar. En comparación, las construcciones marinas flotantes de 1GW de capacidad costarían unos 3.500 millones.
En terminos de costes de producción por MWh, estaríamos hablando de entre 86 y 240€. Podemos encontrar un estudio más detallado que desglosa costes para distintas tecnologías, localizaciones y número de turbinas.
Comparemos estos costes de construcción con los de tecnologías tradicionales. La energia nuclear tiene un coste de unos 4000 millones de euros por GW. La eólica terreste costaría 600 millones de euros por GW. La fotovoltaica, 1200 millones por GW.
El coste de construcción de una central hidroeléctrica es muy variable, pero puede estar en torno a unos 90 millones por GW. En el caso de una térmica de gas, unos 600 millones por GW. Los costes de generación serían de 5.6-7.5€/MWh para la hidraulica, 7.2-8€/MWh para la eólica terrestre, 9.2-13.2€/MWh para la eólica construida sobre el lecho marino, 24.8-28.4€/MWh para la térmica. A comparar con los ya mencionados para la eólica flotante 86-240€/Mwh. Nótese que determinados tipos de energia tales como la térmica y nuclear, pese a su elevado coste, ofrecen un flujo constante de energia a todas horas, mientras que las renovables dependen de la luz solar o del viento.
A menos que se imponga un criterio más a largo plazo que tenga en cuenta la conservación de nuestro ecosistema, solo nos queda poner nuestra confianza en la reducción de costes de las renovables, entre ellas, la eólica flotante.
Estudios hablan de un coste de construcción de 4.200 millones de euros para instalaciones construidas sobre el fondo del mar. En comparación, las construcciones marinas flotantes de 1GW de capacidad costarían unos 3.500 millones.
En terminos de costes de producción por MWh, estaríamos hablando de entre 86 y 240€. Podemos encontrar un estudio más detallado que desglosa costes para distintas tecnologías, localizaciones y número de turbinas.
Comparemos estos costes de construcción con los de tecnologías tradicionales. La energia nuclear tiene un coste de unos 4000 millones de euros por GW. La eólica terreste costaría 600 millones de euros por GW. La fotovoltaica, 1200 millones por GW.
El coste de construcción de una central hidroeléctrica es muy variable, pero puede estar en torno a unos 90 millones por GW. En el caso de una térmica de gas, unos 600 millones por GW. Los costes de generación serían de 5.6-7.5€/MWh para la hidraulica, 7.2-8€/MWh para la eólica terrestre, 9.2-13.2€/MWh para la eólica construida sobre el lecho marino, 24.8-28.4€/MWh para la térmica. A comparar con los ya mencionados para la eólica flotante 86-240€/Mwh. Nótese que determinados tipos de energia tales como la térmica y nuclear, pese a su elevado coste, ofrecen un flujo constante de energia a todas horas, mientras que las renovables dependen de la luz solar o del viento.
A menos que se imponga un criterio más a largo plazo que tenga en cuenta la conservación de nuestro ecosistema, solo nos queda poner nuestra confianza en la reducción de costes de las renovables, entre ellas, la eólica flotante.