Fuente: PhotoXpress.
Un equipo de expertos procedentes de entidades industriales y académicas ha hallado una forma de reducir drásticamente, en más de un 20 %, el consumo energético de los centros de procesamiento de datos que se utilizan en las tecnologías de la información y la comunicación (TIC).
Aunque las TIC han servido para reducir la cantidad de energía que consumimos al eliminar la necesidad de desplazarnos físicamente (por el uso de líneas telefónicas, ordenadores y sistemas audiovisuales), en 2008 fueron las responsables de cerca del 2 % de las emisiones mundiales de dióxido de carbono (CO2).
Este porcentaje supuso casi mil millones de toneladas, una cifra equivalente al consumo de combustible del sector de la aviación.
Sin embargo, mientras que en las administraciones gubernamentales, empresas industriales y autoridades reguladoras está muy presente la necesidad de poner coto a las emisiones del sector aeronáutico, y hay en marcha un debate sobre métodos para lograrlo, no se puede decir lo mismo en relación a la necesidad de reducir el CO2 generado por las TIC para frenar el cambio climático.
Reducir el consumo de los centros de procesamiento de datos
Los llamados centros de procesamiento de datos (CPD) concentran los recursos necesarios para el procesamiento de información de cualquier tipo de organización y constituyen un elemento destacado de las TIC, pero sus cuantiosas emisiones de CO2 resultan perjudiciales tanto para el planeta como para los presupuestos de las empresas, ya que la energía que los CPD consumen supone más del 40 % del total de gastos que acarrean dichos centros.
Ahora, parece que ha aparecido un rayo de esperanza para esta situación. Investigadores dedicados al proyecto financiado con fondos europeos FIT4GREEN («TI federada para un impacto medioambiental sostenible»), al que se otorgaron 3.185.000 euros en virtud del tema de TIC del Séptimo Programa Marco (7PM) de la Unión Europea, creen haber encontrado una solución con la que reducir en más del 20 % el consumo energético de los CPD.
En el marco de este proyecto, especialistas de entidades industriales y académicas diseñaron e implementaron una extensión (plug-in) con conciencia energética, que funciona en paralelo a las herramientas de gestión empleadas en la actualidad en los CPD para organizar la asignación de los recursos de TIC y desactivar el equipo que no se encuentre en uso.
Según los autores, su invento permite un ahorro energético directo del 20 % en la maquinaria de TIC y, lo que no es menos importante, se trata de una tecnología que no vulnera la capacidad de los equipos para cumplir los parámetros relacionados con los Acuerdos de Nivel de Servicio (SLA) y la Calidad de Servicio (CdS).
Es más, según sus creadores, el ahorro que conlleva en cuanto a emisiones de CO2 también se sitúa en torno al 20 %. Por añadidura, los científicos constataron con gran satisfacción que los ahorros energéticos directos que se obtienen en la maquinaria de TIC traen consigo unos importantes ahorros adicionales por la menor necesidad de refrigeración.
Aunque las TIC han servido para reducir la cantidad de energía que consumimos al eliminar la necesidad de desplazarnos físicamente (por el uso de líneas telefónicas, ordenadores y sistemas audiovisuales), en 2008 fueron las responsables de cerca del 2 % de las emisiones mundiales de dióxido de carbono (CO2).
Este porcentaje supuso casi mil millones de toneladas, una cifra equivalente al consumo de combustible del sector de la aviación.
Sin embargo, mientras que en las administraciones gubernamentales, empresas industriales y autoridades reguladoras está muy presente la necesidad de poner coto a las emisiones del sector aeronáutico, y hay en marcha un debate sobre métodos para lograrlo, no se puede decir lo mismo en relación a la necesidad de reducir el CO2 generado por las TIC para frenar el cambio climático.
Reducir el consumo de los centros de procesamiento de datos
Los llamados centros de procesamiento de datos (CPD) concentran los recursos necesarios para el procesamiento de información de cualquier tipo de organización y constituyen un elemento destacado de las TIC, pero sus cuantiosas emisiones de CO2 resultan perjudiciales tanto para el planeta como para los presupuestos de las empresas, ya que la energía que los CPD consumen supone más del 40 % del total de gastos que acarrean dichos centros.
Ahora, parece que ha aparecido un rayo de esperanza para esta situación. Investigadores dedicados al proyecto financiado con fondos europeos FIT4GREEN («TI federada para un impacto medioambiental sostenible»), al que se otorgaron 3.185.000 euros en virtud del tema de TIC del Séptimo Programa Marco (7PM) de la Unión Europea, creen haber encontrado una solución con la que reducir en más del 20 % el consumo energético de los CPD.
En el marco de este proyecto, especialistas de entidades industriales y académicas diseñaron e implementaron una extensión (plug-in) con conciencia energética, que funciona en paralelo a las herramientas de gestión empleadas en la actualidad en los CPD para organizar la asignación de los recursos de TIC y desactivar el equipo que no se encuentre en uso.
Según los autores, su invento permite un ahorro energético directo del 20 % en la maquinaria de TIC y, lo que no es menos importante, se trata de una tecnología que no vulnera la capacidad de los equipos para cumplir los parámetros relacionados con los Acuerdos de Nivel de Servicio (SLA) y la Calidad de Servicio (CdS).
Es más, según sus creadores, el ahorro que conlleva en cuanto a emisiones de CO2 también se sitúa en torno al 20 %. Por añadidura, los científicos constataron con gran satisfacción que los ahorros energéticos directos que se obtienen en la maquinaria de TIC traen consigo unos importantes ahorros adicionales por la menor necesidad de refrigeración.
Funciona en cualquier tipo de CPD
La importancia del proyecto FIT4GREEN es evidente, a la vista de la variedad de socios participantes, desde destacadas multinacionales hasta empresas incipientes y departamentos de facultades universitarias.
La iniciativa fue coordinada por la empresa española GFI Informática. La función de líder tecnológico fue ostentada por el Centro de Innovación de Hewlett Packard (HP-IIC).
Otros socios han sido el Centro de Investigación Técnica de Finlandia (VTT), las universidades de Passau y Mannheim (Alemania), el Imperial College de Londres (Reino Unido), el Centro de Supercomputación de Jülich (JSC, Alemania), Create-Net (empresa de diseño de sitios web con sede en Reino Unido), Eni (multinacional italiana de hidrocarburos) y Almende (empresa neerlandesa de investigación).
Según los investigadores, una de las características más destacadas de la extensión de FIT4GREEN es que se ha diseñado para que pueda implantarse en cualquier tipo de CPD, tal y como se ha confirmado en tres de estos considerados representativos: el portal de servicio y empresa de Eni, el CPD del JSC con un sitio web afiliado en el VTT, y una plataforma de computación en la nube de HP-IIC.
Tecnología ya disponible
La meta del 20 % se cumplió en cada uno de los bancos de pruebas, llegándose incluso en ocasiones a ahorros del 50 %.
La referencia para el cálculo de todas las tasas de ahorro fue el mismo sistema carente de optimizaciones energéticas, según aclaró el VTT, cuya principal aportación al proyecto fue precisamente la optimización en el ensayo en el ámbito de la supercomputación.
La tecnología ya se encuentra al alcance de todos los interesados y los dieciséis resultados públicos del proyecto se pueden obtener de forma gratuita en el sitio web del proyecto FIT4GREEN. Del mismo modo, el código de la extensión se ha difundido como software de código libre.
La importancia del proyecto FIT4GREEN es evidente, a la vista de la variedad de socios participantes, desde destacadas multinacionales hasta empresas incipientes y departamentos de facultades universitarias.
La iniciativa fue coordinada por la empresa española GFI Informática. La función de líder tecnológico fue ostentada por el Centro de Innovación de Hewlett Packard (HP-IIC).
Otros socios han sido el Centro de Investigación Técnica de Finlandia (VTT), las universidades de Passau y Mannheim (Alemania), el Imperial College de Londres (Reino Unido), el Centro de Supercomputación de Jülich (JSC, Alemania), Create-Net (empresa de diseño de sitios web con sede en Reino Unido), Eni (multinacional italiana de hidrocarburos) y Almende (empresa neerlandesa de investigación).
Según los investigadores, una de las características más destacadas de la extensión de FIT4GREEN es que se ha diseñado para que pueda implantarse en cualquier tipo de CPD, tal y como se ha confirmado en tres de estos considerados representativos: el portal de servicio y empresa de Eni, el CPD del JSC con un sitio web afiliado en el VTT, y una plataforma de computación en la nube de HP-IIC.
Tecnología ya disponible
La meta del 20 % se cumplió en cada uno de los bancos de pruebas, llegándose incluso en ocasiones a ahorros del 50 %.
La referencia para el cálculo de todas las tasas de ahorro fue el mismo sistema carente de optimizaciones energéticas, según aclaró el VTT, cuya principal aportación al proyecto fue precisamente la optimización en el ensayo en el ámbito de la supercomputación.
La tecnología ya se encuentra al alcance de todos los interesados y los dieciséis resultados públicos del proyecto se pueden obtener de forma gratuita en el sitio web del proyecto FIT4GREEN. Del mismo modo, el código de la extensión se ha difundido como software de código libre.