Los mercados digitales dan síntomas de saturación en el mundo desarrollado

Los países emergentes son ahora los que más contribuyen a su crecimiento


Los mercados digitales crecieron el año pasado algo menos del PIB mundial según el informe DigiWorld 2007 hecho público por IDATE y ENTER, que señala asimismo que la evolución global de las telecomunicaciones redujo su avance interanual al 4,6%, dado que el negocio de fijo sólo creció un 2,5%. El informe pone de relieve la ralentización de los mercados digitales en los países más desarrollados como consecuencia de la saturación, a la que se une España. La evolución de los mercados digitales señala asimismo que los países emergentes son los que aportan ahora la mayor parte de la contribución al cómputo mundial. Aún así, las TIC siguen imponiéndose, con algunas asignaturas pendientes, como las infraestructuras de banda ancha. En España, empresas y hogares se convierten cada vez más en entornos digitales gracias a la expansión de la electrónica de consumo. Por Yaiza Martínez.


29/05/2007

La consultora francesa IDATE, especializada en el desarrollo de los mercados y de la tecnología, en colaboración con el Centro de Análisis de la Sociedad de la Información y las Telecomunicaciones (ENTER, de España, han presentado por tercer año consecutivo el informe DigiWorld 2007, una publicación conjunta de ambas consultoras en la que, además del análisis del estado del “mundo digital” elaborado por IDATE, se añade una estudio exhaustivo de ENTER sobre la situación de España en este contexto.

En el informe se pone de relieve que, a nivel global, en 2006 los mercados digitales alcanzaron una facturación global de 2.600 millardos de euros, con una progresión del 5,8% con respecto al año anterior, es decir, algo inferior a la del Producto Interior Bruto mundial (6,3%). Esta situación se debe a la fuerte progresión de las ventas de unidades producidas frente a un crecimiento más débil en valor, unido todo ello a las diversas dinámicas regionales,

Según el IDATE, estas progresiones revelan las tensiones que caracterizan el periodo actual: difícil posicionamiento de los agentes tradicionales de telecomunicaciones y medios; implantación del fenómeno Web 2.0 (transición percibida en Internet desde las webs tradicionales a aplicaciones web destinadas a usuarios); búsqueda aún confusa de nuevos modelos económicos; saturación relativa del mercado de los móviles en Europa; el peso creciente de China e India en este sector; los complejos problemas de regulación a los que se enfrentan la consolidación y la convergencia tecnológicas, etc.

Telefonía móvil a la cabeza

Por otro lado, la evolución de los mercados digitales en 2006 señala un aumento de las diferencias entre los mercados desarrollados y los países emergentes: mientras los primeros presentan tasas de crecimiento bastante modestas, los segundos han continuado creciendo a buen ritmo, aportando la mayor parte de la contribución al cómputo mundial.

En estas diferencias tiene especial protagonismo la telefonía móvil que, desde finales del siglo XX, supone el principal impulso de las telecomunicaciones: en las economías emergentes se mantiene ese mismo impulso, pero las más desarrolladas presentan cierto estancamiento, con tasas de crecimiento más moderadas, consecuencia del grado de madurez logrado, con tasas de penetración superiores al 100% en términos de población.

Aún así, el mercado de telefonía móvil volvió a crecer el pasado año por encima de la economía (6,7%), pero sin alcanzar los dos dígitos característicos de años anteriores. No obstante, asegura el Informe, superó en 2006, por primera vez, al de telefonía fija en términos de facturación. Como consecuencia, la evolución global de las telecomunicaciones redujo su avance interanual al 4,6%, dado que el negocio de fijo sólo creció un 2,5%.

Competencia fijo-móvil también en datos

La competencia fijo-móvil no sólo ha radicado en los servicios de voz, sino que en 2006 también se ha trasladado a la transmisión de datos debido a la integración del estándar HSDPA, que permite servir anchos de banda del rango 1-3 Mb, es decir, en línea con lo que ofrecen las versiones más extendidas de DSL.

En lo que se refiere a la Televisión Digital Terrestre (TDT, ha aumentado la oferta, con nuevas cadenas en abierto, aunque de momento no ha traído aparejada una diversificación.

El notable crecimiento del mercado audiovisual (9,2%) se ha debido al incremento de ingresos por publicidad, y la TDT se perfila cada vez más como una tecnología de transición que dará paso a nuevas formas de consumo y distribución de los contenidos.

El caso de España

En cuanto a España, según el informe, sigue la tendencia de ralentización del crecimiento característica de la Unión Europea y Estados Unidos. Nuestro país continúa teniendo como asignatura pendiente la equiparación con las economías centrales de la zona euro en términos de implementación y uso de las nuevas tecnologías. La brecha se va cerrando, pero el acercamiento va más lento de lo que sería deseable, asegura el informe.

Por un lado, las empresas españolas están acometiendo un proceso de innovación y modernización acorde con su contexto global, aunque se aprecia una tendencia dispar en la evolución de los precios unitarios de equipos y servicios: a la baja, los primeros (Ios precios de los ordenadores cayeron un 17,8% en 2006); alcista en los segundos.

Por otro lado, en los hogares, se aprecia un equipamiento progresivo gracias a la expansión de la electrónica de consumo (que creció un 13,6% en 2006 en nuestro país), líder de crecimiento entre los mercados españoles DigiWorld, y sobre la que pende el canon digital como amenaza: el gravamen sobre aparatos y dispositivos de grabación, almacenamiento y reproducción en formato digital, advierte el informe.

El DNI electrónico y el e-commerce

El informe señala asimismo una iniciativa española que considera importante: el DNI electrónico, que aumentará las relaciones online entre administraciones públicas y ciudadanos, facilitando los procesos administrativos. Pero no sólo será importante en el ámbito burocrático, sino además por su potencial como instrumento fiable y seguro de acreditación que facilitará las relaciones en Red.

Por su parte, el comercio electrónico en España sigue lastrado por las reticencias de los usuarios: las transacciones bancarias online asustan (no se perciben como seguras) y la gente siente recelos a introducir sus datos bancarios en Internet. Aún con todo, en 2006 se registraron avances notables en este sector, especialmente en actividades relacionadas con el turismo, los viajes y las vacaciones.

Europeos: ajenos al diseño de Internet

Otras características que señala el informe DigiWorld 2007 son que España y Europa ostentan un escaso protagonismo entre los actores de Internet (frente a USA y también Asia-Pacífico); y la necesidad aún esencial del despliegue de redes avanzadas de acceso a Internet.

En este último punto, el escenario europeo ahora mismo está dominado por ADSL y cable fijo, junto a UMTS (HSDPA o móvil) y TDT o satélite (para televisión), pero habrá que contar muy pronto con tecnologías emergentes como la fibra (FTTx), DSL avanzado, wimax, 4G o las evoluciones presumidas del enlace satelital.

Si actualmente estamos hablando de anchos de banda escalables de hasta los 6-10 Mb, el horizonte más o menos inmediato que prefiguran esas nuevas tecnologías plantean rangos del orden de 100 Mb.

Aún así, el futuro aún no está claro: todavía quedan algunas incógnitas en el aire, como las referentes a la recuperación de las fuertes inversiones requeridas para la implantación de nuevas infraestructuras para la mejora de los accesos, o como la discusión sobre hasta qué punto son necesarios unos u otros rangos de ancho de banda para soportar las aplicaciones que realmente tengan una demanda consistente en el mercado.



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