Ulrich Walwei, en Las Palmas de Gran Canaria. Foto: EP
El responsable del Instituto de Análisis para el Empleo de Alemania, Ulrich Walwei, ha señalado este jueves que la formación y la competitividad son cuestiones necesarias para garantizar el futuro de España.
"Independientemente de las medidas tomadas en España es importante que estas políticas estén apoyadas por una postura política fuerte para no comprometer el Estado, sobre todo, tener un fuerte control. Es importantísimo que se trabaje en el fomento de la formación y competitividad par poder garantizar el futuro del país", resaltó Walwei en unas declaraciones a los medios durante las jornadas de empleo juvenil que se celebran en Las Palmas de Gran Canaria.
Añadió que España es un país desarrollado pero aseguró que "sólo" puede mantenerse en la posición que tiene actualmente "si tiene una productividad, puestos de trabajo estables para no comprometer su equilibrio" e incidió en que, "sobre todo, lo que no puede ser es un país de salarios bajos".
Al respecto, destacó que hay que ofrecerle "buenas" condiciones a los trabajadores y "flexibilidad" para mantener al personal.
En cuanto al proyecto de Presupuesto de Generales del Estado (PGE) del Gobierno español, apuntó que primeramente hay que tener unos presupuestos un poco adaptados" a la situación, haciendo una previsión de gastos para inversiones en el futuro.
Además, dijo, que lo primero que hay que analizar es cuánta deuda se puede soportar y cuál es la disciplina presupuestaria, así como saber "exactamente para qué gasto el dinero".
"Independientemente de las medidas tomadas en España es importante que estas políticas estén apoyadas por una postura política fuerte para no comprometer el Estado, sobre todo, tener un fuerte control. Es importantísimo que se trabaje en el fomento de la formación y competitividad par poder garantizar el futuro del país", resaltó Walwei en unas declaraciones a los medios durante las jornadas de empleo juvenil que se celebran en Las Palmas de Gran Canaria.
Añadió que España es un país desarrollado pero aseguró que "sólo" puede mantenerse en la posición que tiene actualmente "si tiene una productividad, puestos de trabajo estables para no comprometer su equilibrio" e incidió en que, "sobre todo, lo que no puede ser es un país de salarios bajos".
Al respecto, destacó que hay que ofrecerle "buenas" condiciones a los trabajadores y "flexibilidad" para mantener al personal.
En cuanto al proyecto de Presupuesto de Generales del Estado (PGE) del Gobierno español, apuntó que primeramente hay que tener unos presupuestos un poco adaptados" a la situación, haciendo una previsión de gastos para inversiones en el futuro.
Además, dijo, que lo primero que hay que analizar es cuánta deuda se puede soportar y cuál es la disciplina presupuestaria, así como saber "exactamente para qué gasto el dinero".
Impulso de la formación y compromiso de empresarios
En cuanto al paro juvenil, resaltó la necesidad de impulsar la formación "lo antes posible" a través de acciones que se implanten desde primaria porque resaltó que la formación "es lo más importante para evitar empobrecer" y que se vean réditos de esa inversión a largo plazo.
Otro aspecto que destacó es conjugar la etapa formativa escolar con el mercado laboral. Para este economista los jóvenes deberían tener la posibilidad de conocer cuál es entorno empresarial para tener la posibilidad de hacer prácticas en las empresas y mantenerse o adherirse.
Añadió que en Alemania, en lo que la formación profesional se refiere, entre el 55 y 60 por ciento de personas que están cursando ciclos formativos lo combinan con sus estudios y una vez que finalizan están reconocidos estatalmente. "En este sentido, no existe discusión sobre la calidad de ese diploma", resaltó.
Además, apuntó que el "foco de atención" está en la empresa porque en Alemania "es la que abre la puerta a los jóvenes", por lo que indicó que lo que "hay que conseguir es que los empresarios se comprometan".
Y es que en Alemania la situación que se produce es que mientras que los jóvenes "perciben el 30 por ciento del salario mínimo legal y contribuyen en la producción, la empresa tiene la ventaja de tener a un trabajador durante tres años en formación que no le sale nada caro", por lo que consideró que "ambas partes se benefician".
Agregó que aproximadamente un 55 por ciento de las personas con un contrato de aprendiz "permanecen en la empresa donde han hecho las prácticas" y el porcentaje restante tiene "más posibilidad" de encontrar un puesto tras tener una experiencia laboral.
De todos modos, reconoció que el desarrollo de ciertos currículum es difícil para algunos sectores como pueden ser el de las energías y afirma que es necesario un "sistema mucho más permeable" para que ciertos sectores puedan entrar en el mercado laboral.
En cuanto al paro juvenil, resaltó la necesidad de impulsar la formación "lo antes posible" a través de acciones que se implanten desde primaria porque resaltó que la formación "es lo más importante para evitar empobrecer" y que se vean réditos de esa inversión a largo plazo.
Otro aspecto que destacó es conjugar la etapa formativa escolar con el mercado laboral. Para este economista los jóvenes deberían tener la posibilidad de conocer cuál es entorno empresarial para tener la posibilidad de hacer prácticas en las empresas y mantenerse o adherirse.
Añadió que en Alemania, en lo que la formación profesional se refiere, entre el 55 y 60 por ciento de personas que están cursando ciclos formativos lo combinan con sus estudios y una vez que finalizan están reconocidos estatalmente. "En este sentido, no existe discusión sobre la calidad de ese diploma", resaltó.
Además, apuntó que el "foco de atención" está en la empresa porque en Alemania "es la que abre la puerta a los jóvenes", por lo que indicó que lo que "hay que conseguir es que los empresarios se comprometan".
Y es que en Alemania la situación que se produce es que mientras que los jóvenes "perciben el 30 por ciento del salario mínimo legal y contribuyen en la producción, la empresa tiene la ventaja de tener a un trabajador durante tres años en formación que no le sale nada caro", por lo que consideró que "ambas partes se benefician".
Agregó que aproximadamente un 55 por ciento de las personas con un contrato de aprendiz "permanecen en la empresa donde han hecho las prácticas" y el porcentaje restante tiene "más posibilidad" de encontrar un puesto tras tener una experiencia laboral.
De todos modos, reconoció que el desarrollo de ciertos currículum es difícil para algunos sectores como pueden ser el de las energías y afirma que es necesario un "sistema mucho más permeable" para que ciertos sectores puedan entrar en el mercado laboral.