Semillas de uvas de hace 60 millones de años, incluidas las más antiguas jamás encontradas en el hemisferio occidental, revelan cómo la muerte de los dinosaurios pudo haber propiciado la propagación de las uvas y, posteriormente, la domesticación de las vides que hizo posible el comienzo de la producción del vino, una de las bebidas más populares en todo el planeta.
Fuente : https://www.levante-emv.com/tendencias21/2024/08/1...
Fuente : https://www.levante-emv.com/tendencias21/2024/08/1...