Fotografía de DSC-N1. stock.xchng.
Cualquiera pensaría que en tiempos de crisis económica en los que hay recortes de gastos y despidos masivos en las compañías, los salarios de los directivos sufrirían igualmente notorias disminuciones relacionadas con el menor desempeño de los negocios.
Estas consecuencias negativas las sintieron de distintas maneras gran parte de los trabajadores de la mayoría de las empresas durante 2008; muchos fueron despedidos, otros vieron considerablemente reducidos sus salarios y dejaron de ver recompensas por buen desempeño.
Pero no para todos la situación fue la misma. Una nueva encuesta del grupo The Corporate Library en la que participaron 2700 compañías públicas afirma que hubo un grupo que resultó inmune a las heridas de la crisis económica: se trata de los directores ejecutivos, quienes solo vieron disminuidas sus compensaciones anuales promedio en un imperceptible 0,8% durante 2008.
Además, el estudio revela que tres cuartos de los encuestados incluso obtuvieron un aumento en su salario base el año pasado.
Salarios inmunes
Según los datos que dio a conocer esta encuesta, hay varios indicadores de que el salario de los directores ejecutivos es inmune a la realidad y no está directamente relacionado con el desempeño de la compañía, por lo que tiempos de vacas flacas para todos, lo que reciben los directivos sigue siendo igual o incluso mayor.
Por ejemplo, la compensación total que recibieron el año pasado los directivos, teniendo en cuenta pensiones, acciones, opciones y compensaciones a largo plazo, muestra una caída promedio de solo 6,4%, con únicamente 56% de estas personas sintiendo una disminución en sus compensaciones totales de 2008.
Como lo explica Paul Hodgson, asociado de investigaciones de The Corporate Library, “Parafraseando las palabras de Mark Twain, los rumores de la muerte de la paga de los directores ejecutivos han sido enormemente exagerados. De hecho, lejos de caer frente a sus caras –como lo hizo la economía- tuvo apenas un tropezón en su firme escalada”.
Los resultados del informe lo que hacen es resaltar lo lejos que está hoy la noción de paga relacionada con desempeño de la realidad.
Directores ejecutivos con salarios de hierro
Hasta los expertos pensarían que habría caídas significativas de los salarios y compensaciones en épocas como las que vivió el mundo el año pasado. De acuerdo con Hodgson, así los contratos de los directores ejecutivos hayan sido acordados antes de la crisis financiera, cualquiera esperaría que algunos elementos de los paquetes de remuneración como los bonos en efectivo reflejaran el desempeño.
Y es que hay ejemplos puntuales que evidencian las afirmaciones de la encuesta haciendo creer que no existe ningún vínculo entre salario y desempeño. Para mencionar uno, está Larry Ellison de Oracle, el segundo mejor pagado de la encuesta, quien el año pasado recibió US$543 millones mientras que el valor de su compañía en el mercado se redujo en 21%.
Y, para hacer aún más evidente el enorme vacío que existe entre el desempeño de las empresas y los salarios que reciben sus directores ejecutivos, está la comparación entre Ellison y otros de los encuestados como Michael Jeffries, de Abercrombie & Fitch, con personajes como Steve Jobs, de Apple, quien en 10 años, durante los cuales la acción de la compañía subió 860%, solo ha recibido US$160 millones.
Finalmente, es importante mencionar que, teniendo en cuenta datos como estos, no es tan incoherente el bajo nivel de confianza del público en las grandes compañías norteamericanas, ya que en los negocios es fundamental conservar siempre la justicia y la relación entre pago y desempeño.
Estas consecuencias negativas las sintieron de distintas maneras gran parte de los trabajadores de la mayoría de las empresas durante 2008; muchos fueron despedidos, otros vieron considerablemente reducidos sus salarios y dejaron de ver recompensas por buen desempeño.
Pero no para todos la situación fue la misma. Una nueva encuesta del grupo The Corporate Library en la que participaron 2700 compañías públicas afirma que hubo un grupo que resultó inmune a las heridas de la crisis económica: se trata de los directores ejecutivos, quienes solo vieron disminuidas sus compensaciones anuales promedio en un imperceptible 0,8% durante 2008.
Además, el estudio revela que tres cuartos de los encuestados incluso obtuvieron un aumento en su salario base el año pasado.
Salarios inmunes
Según los datos que dio a conocer esta encuesta, hay varios indicadores de que el salario de los directores ejecutivos es inmune a la realidad y no está directamente relacionado con el desempeño de la compañía, por lo que tiempos de vacas flacas para todos, lo que reciben los directivos sigue siendo igual o incluso mayor.
Por ejemplo, la compensación total que recibieron el año pasado los directivos, teniendo en cuenta pensiones, acciones, opciones y compensaciones a largo plazo, muestra una caída promedio de solo 6,4%, con únicamente 56% de estas personas sintiendo una disminución en sus compensaciones totales de 2008.
Como lo explica Paul Hodgson, asociado de investigaciones de The Corporate Library, “Parafraseando las palabras de Mark Twain, los rumores de la muerte de la paga de los directores ejecutivos han sido enormemente exagerados. De hecho, lejos de caer frente a sus caras –como lo hizo la economía- tuvo apenas un tropezón en su firme escalada”.
Los resultados del informe lo que hacen es resaltar lo lejos que está hoy la noción de paga relacionada con desempeño de la realidad.
Directores ejecutivos con salarios de hierro
Hasta los expertos pensarían que habría caídas significativas de los salarios y compensaciones en épocas como las que vivió el mundo el año pasado. De acuerdo con Hodgson, así los contratos de los directores ejecutivos hayan sido acordados antes de la crisis financiera, cualquiera esperaría que algunos elementos de los paquetes de remuneración como los bonos en efectivo reflejaran el desempeño.
Y es que hay ejemplos puntuales que evidencian las afirmaciones de la encuesta haciendo creer que no existe ningún vínculo entre salario y desempeño. Para mencionar uno, está Larry Ellison de Oracle, el segundo mejor pagado de la encuesta, quien el año pasado recibió US$543 millones mientras que el valor de su compañía en el mercado se redujo en 21%.
Y, para hacer aún más evidente el enorme vacío que existe entre el desempeño de las empresas y los salarios que reciben sus directores ejecutivos, está la comparación entre Ellison y otros de los encuestados como Michael Jeffries, de Abercrombie & Fitch, con personajes como Steve Jobs, de Apple, quien en 10 años, durante los cuales la acción de la compañía subió 860%, solo ha recibido US$160 millones.
Finalmente, es importante mencionar que, teniendo en cuenta datos como estos, no es tan incoherente el bajo nivel de confianza del público en las grandes compañías norteamericanas, ya que en los negocios es fundamental conservar siempre la justicia y la relación entre pago y desempeño.