Estando lejos de nuestra cultura y de nuestros compatriotas hablamos mejor otros idiomas

Un estudio demuestra cómo influyen las referencias de origen en esta capacidad


Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Columbia (Nueva York) y de una universidad de Singapur ha comprobado que hablar otros idiomas no es tan sencillo cuando estamos con compatriotas o dentro de nuestra propia cultura. Por ejemplo, un chino que sea capaz de hablar inglés fluido con un estadounidense, puede meter la pata conversando con un compatriota o hablando de alguna referencia cultural de su propio país.


SINC/T21
19/06/2013

La manera en que una persona utiliza un idioma ajeno depende del idioma materno de su interlocutor. Imagen: nionx. Fuente: StockXchng.
Un estudiante recién llegado de China es capaz de hablar inglés fluido con un compañero estadounidense, pero mete la pata al hablar inglés con un compatriota.

Asimismo, una cara o símbolo que le haga recordar la cultura propia puede afectar a la habilidad para hablar un segundo idioma.

Investigadores de la Escuela de Negocios de Columbia (Nueva York) y de la Universidad de Dirección de Empresas de Singapur han estudiado si el patrimonio cultural dificulta la capacidad de comunicarse en una lengua extranjera, al activar el recuerdo del idioma nativo, según un estudio publicado ayer en PNAS del que se hace eco SINC.

Para ello observaron las diferencias en la fluidez que mostraban los estudiantes chinos al hablar inglés con otros chinos o con estadounidenses nativos.

También incluyeron imágenes de símbolos icónicos de China y EEUU para comprobar el efecto que causaban.

Las conclusiones muestran que la habilidad para hablar una segunda lengua se ve afectada por imágenes relacionadas con el patrimonio cultural, tanto caras como símbolos chinos, en un proceso llamado activación cultural.

En el experimento, la ‘activación china’ mediante pistas culturales también provocaba que la estructura del idioma chino invadiera la inglesa, al producirse traducciones literales del chino al inglés durante la conversación.

'Frutos secos felices'

Estas traducciones literales también se produjeron durante un ejercicio consistente en nombrar objetos. Los estudiantes chinos utilizaban palabras como “azúcar con palo”, “máquina empujadora de tierra” o “frutos secos felices” en lugar de chupa-chup, bulldozer o pistacho.

La investigación demuestra que las pistas culturales afectan a la gente mediante un mecanismo de activación. También contribuye a entender cómo los bilingües controlan sus dos idiomas y a mejorar el aprendizaje de lenguas extranjeras.

En estudios anteriores, estudiantes estadounidenses de español realizaron el mismo curso en EEUU y en España.

El grupo que se trasladó a España aprendió más que sus compañeros, lo que se relaciona con el presente trabajo.




SINC/T21
Artículo leído 2074 veces



Más contenidos