Aviador Dro. A. Ramirez De Arellano
Cuando planteamos a uno de los físicos españoles más importantes de todos los tiempos participar en La Voz de la Ciencia, hablamos de Ignacio Cirac, apenas el proyecto ACTS La Voz de la Ciencia estaba tomando cuerpo y uno de los retos científicos y tecnológicos que teníamos definido era el "entrelazamiento cuántico" y los ordenadores cuánticos. Volaba nuestra imaginación hacia el mundo de las superposiciones cuánticas. E Ignacio Cirac, desde el Instituto Max Planck nos dijo que sería todo un placer colaborar en el proyecto, dándole así un gran impulso.
También nos respondió: ¿Cómo serán los ordenadores del futuro? Esta pregunta, como todas las relacionadas con la previsión de desarrollos tecnológicos, no tiene una respuesta fácil. Probablemente, esos ordenadores no tengan nada que ver con los actuales; o, tal vez, sean superados por otros equipos que aún están por descubrir. Lo que está claro es que, en algunos ámbitos, cada vez se necesitan computadores más rápidos y con mayor capacidad de almacenar y procesar datos.
Hasta ahora, ésto se consigue disminuyendo el tamaño de los procesadores de información: de esta forma, además de aumentar la densidad de almacenamiento, la información tiene que recorrer menores distancias, lo que hace que los procesos sean más rápidos.
Pero esta carrera hacia la miniaturización de los procesadores no puede continuar indefinidamente. En cuanto lleguemos a la escala átomica nos encontraremos con un impedimento. Las leyes de la física del mundo macroscópico dejan de ser válidas y aparecen fenómenos extraordinarios que vienen descritos por otras leyes: las de la física cuántica.
La física cuántica es una teoría que describe el mundo de las partículas que componen nuestro mundo, como los átomos, los electrones, o los fotones. Entre otras muchas cosas, esta teoría predice la existencia de una incertidumbre natural en algunos procesos físicos. Por ejemplo, nos dice que la posición y la velocidad de una partícula no pueden estar definidas con total precisión. Así, un átomo puede estar en un “estado de superposición”, en donde se comporta como si estuviera en varios lugares a la vez, moviéndose a distintas velocidades. El concepto de superposición cuántica no tiene ninguna analogía en nuestro mundo macroscópico y, por consiguiente, es muy difícil de comprender.
Universos paralelos
Para dar una idea de su significado, a veces se utiliza el símil de los universos paralelos. Una partícula microscópica se comporta como si su universo se desdoblase en varias “ramas”. En cada una de ellas, la partícula tiene una propiedad definida. Sin embargo, como todos esos universos conviven a la vez, no podemos asignar un valor específico a esa propiedad. Por ejemplo, podríamos tener un átomo el cual, en una rama del universo, pasa por un sitio, mientras que en otra rama pasa por otro. Si preguntamos por qué lugar ha pasado, no podremos dar una respuesta adecuada ya que ha pasado por los dos.
Esta forma de explicar las superposiciones cuánticas ha de ser tomada con mucha precaución, ya que sólo es una forma de ofrecer cierta intuición sobre un fenómeno que ocurre en el mundo de los objetos microscópicos. La existencia de estados de superposición en átomos, electrones, o fotones ha sido verificada experimentalmente desde hace tiempo y constituye una de las bases de la física moderna. Pero el mismo hecho de que existan implica que, en cuanto intentemos dominar el mundo microscópico para construir procesadores más y más diminutos, nos deberemos enfrentar a estos fenómenos extraordinarios, que nos podrían impedir construir ordenadores más potentes.
Desde hace tiempo sabemos que la física cuántica, en vez de ser un impedimento, puede proporcionarnos nuevas posibilidades en la construcción de ordenadores. Si realmente llegamos a dominar el mundo cuántico, deberíamos de ser capaces de construir ordenadores mucho más potentes de lo que jamás podremos tener si no invocamos las leyes de la física cuántica. La clave está en las superposiciones cuánticas, que nos permitirían con un solo ordenador realizar millones y millones de operaciones a la vez".
Album disco
En paralelo al inicio del proyecto La Voz de la Ciencia se sumó Tendencias21, que a través de dos de sus redactoras más destacadas Yaiza Martínez y Maricar García colaboraban en el reto científico Geoingeniería y Cambio Climático. También @QUO lanzaba un concurso en redes sociales, para que lectores e internautas imaginasen una profesión de un futuro a medio plazo con el hashtag de #mihijoserá #mihija será, un concurso que ganó el bloguero y riguroso divulgador científico @edocet con su propuesta #mihijaserá diseñadora de ordenadores cuánticos autoensamblables, nada menos...
También nos respondió: ¿Cómo serán los ordenadores del futuro? Esta pregunta, como todas las relacionadas con la previsión de desarrollos tecnológicos, no tiene una respuesta fácil. Probablemente, esos ordenadores no tengan nada que ver con los actuales; o, tal vez, sean superados por otros equipos que aún están por descubrir. Lo que está claro es que, en algunos ámbitos, cada vez se necesitan computadores más rápidos y con mayor capacidad de almacenar y procesar datos.
Hasta ahora, ésto se consigue disminuyendo el tamaño de los procesadores de información: de esta forma, además de aumentar la densidad de almacenamiento, la información tiene que recorrer menores distancias, lo que hace que los procesos sean más rápidos.
Pero esta carrera hacia la miniaturización de los procesadores no puede continuar indefinidamente. En cuanto lleguemos a la escala átomica nos encontraremos con un impedimento. Las leyes de la física del mundo macroscópico dejan de ser válidas y aparecen fenómenos extraordinarios que vienen descritos por otras leyes: las de la física cuántica.
La física cuántica es una teoría que describe el mundo de las partículas que componen nuestro mundo, como los átomos, los electrones, o los fotones. Entre otras muchas cosas, esta teoría predice la existencia de una incertidumbre natural en algunos procesos físicos. Por ejemplo, nos dice que la posición y la velocidad de una partícula no pueden estar definidas con total precisión. Así, un átomo puede estar en un “estado de superposición”, en donde se comporta como si estuviera en varios lugares a la vez, moviéndose a distintas velocidades. El concepto de superposición cuántica no tiene ninguna analogía en nuestro mundo macroscópico y, por consiguiente, es muy difícil de comprender.
Universos paralelos
Para dar una idea de su significado, a veces se utiliza el símil de los universos paralelos. Una partícula microscópica se comporta como si su universo se desdoblase en varias “ramas”. En cada una de ellas, la partícula tiene una propiedad definida. Sin embargo, como todos esos universos conviven a la vez, no podemos asignar un valor específico a esa propiedad. Por ejemplo, podríamos tener un átomo el cual, en una rama del universo, pasa por un sitio, mientras que en otra rama pasa por otro. Si preguntamos por qué lugar ha pasado, no podremos dar una respuesta adecuada ya que ha pasado por los dos.
Esta forma de explicar las superposiciones cuánticas ha de ser tomada con mucha precaución, ya que sólo es una forma de ofrecer cierta intuición sobre un fenómeno que ocurre en el mundo de los objetos microscópicos. La existencia de estados de superposición en átomos, electrones, o fotones ha sido verificada experimentalmente desde hace tiempo y constituye una de las bases de la física moderna. Pero el mismo hecho de que existan implica que, en cuanto intentemos dominar el mundo microscópico para construir procesadores más y más diminutos, nos deberemos enfrentar a estos fenómenos extraordinarios, que nos podrían impedir construir ordenadores más potentes.
Desde hace tiempo sabemos que la física cuántica, en vez de ser un impedimento, puede proporcionarnos nuevas posibilidades en la construcción de ordenadores. Si realmente llegamos a dominar el mundo cuántico, deberíamos de ser capaces de construir ordenadores mucho más potentes de lo que jamás podremos tener si no invocamos las leyes de la física cuántica. La clave está en las superposiciones cuánticas, que nos permitirían con un solo ordenador realizar millones y millones de operaciones a la vez".
Album disco
En paralelo al inicio del proyecto La Voz de la Ciencia se sumó Tendencias21, que a través de dos de sus redactoras más destacadas Yaiza Martínez y Maricar García colaboraban en el reto científico Geoingeniería y Cambio Climático. También @QUO lanzaba un concurso en redes sociales, para que lectores e internautas imaginasen una profesión de un futuro a medio plazo con el hashtag de #mihijoserá #mihija será, un concurso que ganó el bloguero y riguroso divulgador científico @edocet con su propuesta #mihijaserá diseñadora de ordenadores cuánticos autoensamblables, nada menos...
Ignacio Cirac.
Así echábamos a andar y fue una de las primeras canciones del álbum disco-libro "La Voz de la Ciencia", proyecto de divulgación científico-musical que aborda los retos científicos y tecnológicos del siglo XXI cuyo impacto en la sociedad del conocimiento sea significativo, singular e incluso paradigmático...así nacía Entrelazados, déjate llevar por la fuerza del entrelazamiento cuántico:
Ignacio Cirac y El Aviador Dro "actuarán" juntos en la Residencia de Investigadores de Barcelona el próximo 20 de abril a partir de las 19 horas, acceso libre. Ordenadores cuánticos, Entrelazados, Materia Oscura, Multiverso...será interesante y divertido.
Os recordamos también que el próximo 23 de marzo se presenta ACTS La Voz de la Ciencia en el Ateneo de Madrid. Este magno y divertido acontecimiento científico-musical dará paso a la primera fase de eventos, actuaciones y conferencias de ACTS La Voz de la Ciencia en centros multidisciplinares, museos de ciencia y planetarios. Hemos creado un evento en Facebook ¡No olvides inscribirte!
Ignacio Cirac y El Aviador Dro "actuarán" juntos en la Residencia de Investigadores de Barcelona el próximo 20 de abril a partir de las 19 horas, acceso libre. Ordenadores cuánticos, Entrelazados, Materia Oscura, Multiverso...será interesante y divertido.
Os recordamos también que el próximo 23 de marzo se presenta ACTS La Voz de la Ciencia en el Ateneo de Madrid. Este magno y divertido acontecimiento científico-musical dará paso a la primera fase de eventos, actuaciones y conferencias de ACTS La Voz de la Ciencia en centros multidisciplinares, museos de ciencia y planetarios. Hemos creado un evento en Facebook ¡No olvides inscribirte!
Entrelazados
La distancia ya no existe así
Ahora la luz no es límite, para mí
Diseñadora molecular
He expandido mi capacidad de calcular
Ordenador cuántico para experimentar
Nano-ordenadores en un espacio infinitesimal
Autoensamblaje vibratorio
Qubit cuántico aleatorio
Los datos se convierten
en Pulsos de la red
Me reconstruyo de nuevo
Para verte, otra vez
Los datos se convierten
en Pulsos de la red
Entrelazados por siempre
Me teleportaré
No importa que estés a mi lado
No importa cuánto te hayas alejado
Hemos sido entrelazados
Estado cuántico alterado
Los datos se convierten
en Pulsos de la red
Me reconstruyo de nuevo
Para verte, otra vez
Los datos se convierten
en Pulsos de la red
Entrelazados por siempre
Me teleportaré
EL AVIADOR DRO
La distancia ya no existe así
Ahora la luz no es límite, para mí
Diseñadora molecular
He expandido mi capacidad de calcular
Ordenador cuántico para experimentar
Nano-ordenadores en un espacio infinitesimal
Autoensamblaje vibratorio
Qubit cuántico aleatorio
Los datos se convierten
en Pulsos de la red
Me reconstruyo de nuevo
Para verte, otra vez
Los datos se convierten
en Pulsos de la red
Entrelazados por siempre
Me teleportaré
No importa que estés a mi lado
No importa cuánto te hayas alejado
Hemos sido entrelazados
Estado cuántico alterado
Los datos se convierten
en Pulsos de la red
Me reconstruyo de nuevo
Para verte, otra vez
Los datos se convierten
en Pulsos de la red
Entrelazados por siempre
Me teleportaré
EL AVIADOR DRO