¿Quién no ha soñado alguna vez con el DeLorean del doctor Emmett Brown y su condensador de fluzo? Un coche que, aparte de volar y viajar en el tiempo, fue el primer vehículo de combustión interna, gracias a algunos restos orgánicos, compaginada con energía eléctrica. La ciencia ficción siempre ha ido un paso por delante de la tecnología, rompiendo la barrera de las leyes de la física.
Han pasado casi tres décadas pero, a pesar de las teorías “conspiranoicas” de que los coches eléctricos no iban a ver nunca la luz, en los últimos años hemos podido ver cómo la comercialización y el uso de este tipo de vehículos se han incrementado.
Nosotros hemos probado el nuevo E-Méhari de Citroën, un descapotable de 4 plazas, 100% eléctrico. Alcanza una velocidad máxima de 110 km por hora y tiene una autonomía en ciclo urbano de 200 km, y de 100 km en ciclo extraurbano.
El modelo de Citroën usa baterías LMP (Lithium Métal Polymère), cuyos tiempos de recarga oscilan entre las ocho y las 13 horas, según la corriente sea de 16 o de 10 amperios. Además, estas baterías son insensibles a las variaciones climáticas.
Con este vehículo hemos recorrido las calles de Madrid en compañía del doctor Gorostiza, quien nos ha explicado las características técnicas y las ventajas de estos automóviles.
Cada vez más presente
El coche eléctrico está cada vez más presente en las grandes ciudades y tiene muchas ventajas: no contamina, es silencioso y es de cambio automático. No sólo reducen las emisiones de CO2 y gases de efecto invernadero a la atmósfera, sino que también disminuyen la contaminación acústica. Y la conducción automática es mucho más simple e intuitiva, además de reducir tiempos de espera al arrancar o desacelerar.
Asimismo, en las ciudades en las cuales está puesto en marcha el Servicio de Estacionamiento Regulado, también conocido como Ordenanza Reguladora de Aparcamiento o parquímetro de pago, los coches eléctricos que tengan tramitada la autorización “Cero emisiones” están exentos de pago. Esta autorización permite estacionar tanto en la zona azul reservada para visitantes como en la zona verde reservada para residentes, sin coste alguno ni restricción temporal, siempre que no esté prohibido aparcar por alguna norma general o particular (vado, carga y descarga…). Los vehículos eléctricos también pueden hacer uso del carril BusVAO aunque solo vaya un ocupante en su interior.
Han pasado casi tres décadas pero, a pesar de las teorías “conspiranoicas” de que los coches eléctricos no iban a ver nunca la luz, en los últimos años hemos podido ver cómo la comercialización y el uso de este tipo de vehículos se han incrementado.
Nosotros hemos probado el nuevo E-Méhari de Citroën, un descapotable de 4 plazas, 100% eléctrico. Alcanza una velocidad máxima de 110 km por hora y tiene una autonomía en ciclo urbano de 200 km, y de 100 km en ciclo extraurbano.
El modelo de Citroën usa baterías LMP (Lithium Métal Polymère), cuyos tiempos de recarga oscilan entre las ocho y las 13 horas, según la corriente sea de 16 o de 10 amperios. Además, estas baterías son insensibles a las variaciones climáticas.
Con este vehículo hemos recorrido las calles de Madrid en compañía del doctor Gorostiza, quien nos ha explicado las características técnicas y las ventajas de estos automóviles.
Cada vez más presente
El coche eléctrico está cada vez más presente en las grandes ciudades y tiene muchas ventajas: no contamina, es silencioso y es de cambio automático. No sólo reducen las emisiones de CO2 y gases de efecto invernadero a la atmósfera, sino que también disminuyen la contaminación acústica. Y la conducción automática es mucho más simple e intuitiva, además de reducir tiempos de espera al arrancar o desacelerar.
Asimismo, en las ciudades en las cuales está puesto en marcha el Servicio de Estacionamiento Regulado, también conocido como Ordenanza Reguladora de Aparcamiento o parquímetro de pago, los coches eléctricos que tengan tramitada la autorización “Cero emisiones” están exentos de pago. Esta autorización permite estacionar tanto en la zona azul reservada para visitantes como en la zona verde reservada para residentes, sin coste alguno ni restricción temporal, siempre que no esté prohibido aparcar por alguna norma general o particular (vado, carga y descarga…). Los vehículos eléctricos también pueden hacer uso del carril BusVAO aunque solo vaya un ocupante en su interior.