El calentamiento global aumenta las emisiones de carbono procedentes del suelo

Ese efecto es mayor en las zonas que más rápido se están calentando, mientras que en las zonas agrícolas es el contrario


El calentamiento global está aumentando, de media, las tasas de descomposición de los suelos, y la emisión del dióxido de carbono que contienen. Ese efecto es mayor en las zonas no cultivadas, y que más cantidad de carbono acumulan -entre ellas las zonas boreales y árticas, que son las que más rápido se están calentando-, mientras que en las zonas cultivadas el efecto del calentamiento es el contrario, puesto que se reducen las emisiones.


CTFC/SINC/T21
04/09/2014

En el estudio se analizaron suelos de diversas partes del mundo, entre ellas los ecosistemas boreales y árticos. Fuente: Nature.
El potencial del calentamiento global para estimular las tasas de descomposición del suelo, y en consecuencia para emitir grandes cantidades de dióxido de carbono a la atmósfera, ha sido considerado uno de los mecanismos potenciales de retroalimentación positiva más importantes del cambio climático.

Sin embargo, las teorías fisiológicas y bioquímicas hasta ahora sugerían que las respuestas de las comunidades microbianas del suelo podrían reducir significativamente, o incluso eliminar, el potencial de pérdidas de carbono edáfico -del suelo- bajo el cambio climático.

Esta hipótesis clave ha sido contrastada ahora utilizando suelos a lo largo de un gradiente termal que abarca desde el Ártico hasta la selva amazónica. Los resultados de un estudio publicado en Nature, en el que participan investigadores del Centro Tecnológico Forestal de Cataluña (CTFC) y de la Universidad de Lleida, muestran que, al contrario de lo esperado, las respuestas de las comunidades microbianas dieron como resultado un aumento global de los efectos de la temperatura sobre la tasa de emisión de dióxido de carbono del suelo.

Kristiina Karhu, de la Universidad de Helsinki (Finlandia) y primera autora del artículo, explica en una nota de prensa del CTFC, recogida por Sinc: "Puesto que los suelos acumulan dos veces más carbono del que hay en la atmósfera, los cambios en las tasas de descomposición y de emisión de dióxido de carbono podrían ser muy importantes. Nuestros resultados sugieren que el calentamiento global incrementará la actividad microbiana en proporción mayor a la esperada con anterioridad, lo cual podría tener implicaciones para las tasas futuras de cambio climático”.

Las respuestas encontradas no fueron iguales para todos los suelos estudiados. Los suelos agrícolas constituyeron los únicos suelos en los que de hecho las comunidades microbianas redujeron los efectos de un cambio en temperatura sobre las tasas de emisiones.

En cambio, los mayores efectos de estimulación de la actividad microbiana se observaron en suelos con los contenidos de carbono más altos y aquellos de las regiones del mundo que se están calentando más rápidamente: los ecosistemas boreales y árticos.

En España

M. Teresa Sebastià, coordinadora del equipo español que participa en este estudio, aclara: ”Aplicado a nuestro país, esto sugiere que las comunidades microbianas de suelos mediterráneos responden menos al calentamiento, pero los suelos de las zonas más frías y de montaña, preferentemente los no cultivados y aquellos capaces de acumular cantidades significativas de carbono orgánico, serían más vulnerables de lo que se pensaba.”.

Iain Hartley, de la Universidad de Exeter (Inglaterra) y coordinador del estudio, añade: ”El reconocimiento de la importancia de entender las respuestas de las comunidades microbianas del suelo es muy reciente. En los últimos años se han llevado a cabo grandes avances, y ahora hay modelos que simulan procesos microbianos que son clave. Tenemos la oportunidad de avanzar realmente en este tema, pero todavía queda muchísimo por entender mejor”.

El estudio se llevó a cabo en el marco de una colaboración internacional que incluye investigadores de Europa, Australia y Sudamérica.

Referencia bibliográfica:

Kristiina Karhu et al.: Temperature sensitivity of soil respiration rates enhanced by microbial community response. Nature (2014). DOI:10.1038/nature13604.



CTFC/SINC/T21
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