El bosque de todos: ¿Qué hacer contra los oscuros presagios del IPCC?

El proyecto Mirlo arranca con la reforestación de La Orotava, pero aspira a expandirse


Las previsiones sobre el cambio climático hechas públicas por el IPCC resultan desalentadoras. Pero miles de personas han conseguido clasificar cientos de miles de galaxias. Ambas noticias no guardan relación, pero sí demuestran dos cosas: el efecto del ser humano sobre el planeta, y la capacidad de la masa para lograr grandes objetivos. ¿Qué tal si en lugar de contar galaxias nos decidimos a plantar árboles juntos? El escenario climático para 2100 quizá dé un giro. Por Yaiza Martínez.


30/09/2013

"No heredamos la Tierra de nuestros ancestros, sólo se la tomamos prestada a nuestros propios hijos” (proverbio de los nativos americanos)



La semana pasada recibimos una mala noticia: el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de la ONU (IPCC) ha proyectado que, para el año 2100, la temperatura del planeta podría incrementarse en hasta 4,8ºC y el nivel del mar aumentar hasta 82 centímetros.

También recibimos una buena noticia: Más de 83.000 voluntarios han clasificado más de 300.000 galaxias, un trabajo equivalente a 30 años a tiempo completo de un científico, en el marco del proyecto Galaxy Zoo 2.

Aparentemente, ambas no guardan relación alguna, pero para nosotros sí la tiene. La primera demuestra que la acción del ser humano es muy importante para el planeta, pues los expertos del IPCC han señalado que, con una probabilidad del 95%, el cambio climático antropogénico es un hecho. La segunda deja claro que la reunión masiva de acciones individuales puede lograr grandes cosas.

La síntesis de ambas novedades sugiere que entre todos podríamos modificar la trayectoria aparentemente catastrófica del planeta. Pero, ¿cómo?

Esas máquinas perfectas

Una de las herramientas clave para frenar el cambio climático está en unas “máquinas” naturales que resultan altamente eficientes en la captura del CO2 atmosférico, uno de los gases de efecto invernadero que más daño están haciendo al sistema climático de la Tierra.

Esas máquinas son los árboles: El cambio climático puede frenarse en gran medida mediante la reforestación. Los expertos de la empresa Mirlo Positive Nature lo saben desde hace tiempo, y por eso pretenden plantar muchos árboles, todos los posibles.

Se han propuesto empezar por un sitio muy concreto de nuestra geografía nacional: el mayor espacio natural protegido de Canarias, la Corona Forestal‎. Pero este proyecto es sólo el comienzo. La idea es extender este crowdsourcing con objetivo ecológico a otros lugares de España y de Europa en los próximos años.

Pero, para conseguirlo, se necesita la ayuda de todos, la colaboración y la inteligencia colectivas. De ahí el lema de Mirlo Positive Nature: “Hazte mirlo!”

¿Qué es hacerse “mirlo”?

“Hacerse mirlo” supone participar en este proyecto conjunto con pequeñas cantidades económicas que se transformarán en árboles plantados. En cifras: cada 7,7 euros que se donen se convertirán en un árbol.

Con el primer proyecto de Mirlo Positive Nature, se pretenden plantar 43.500 árboles en La Orotava, reforestar 29 hectáreas de bosque autóctono. Cuando crezcan, estos árboles fijarán más de 12.000 toneladas de CO2 equivalentes, por ejemplo, a las emisiones de más de 16.000 vuelos entre Canarias y Madrid o las emisiones anuales de 4.500 coches.

Pero este hermoso proyecto y los que vendrán a continuación nos necesitan. Cualquiera puede contribuir a él. Basta con entrar en la tienda de Mirlo Positive Nature y elegir qué parte de huella ecológica negativa de nuestra vida cotidiana queremos transformar en positivo.

Si entre muchos han podido clasificar nada menos que 300.000 galaxias en un año, ¿no podremos reparar entre muchos, al menos en parte, el daño que hemos infligido a la Tierra? En Tendencias21 creemos que sí, por eso nos hemos sumado a esta apasionante iniciativa, a la que invitamos a participar a todos nuestros lectores. La Orotava es sólo el comienzo.



Artículo leído 8245 veces



Más contenidos