Crean bombas de agua móviles a partir de bicicletas de desecho

Podrían tener una amplia aplicación en comunidades rurales


Un estudiante de ingeniería mecánica de la Universidad de Sheffield diseñó una bomba de agua móvil que funciona a partir de bicicletas en desuso. El desarrollo ha sido aplicado en comunidades de Guatemala con la colaboración de la ONG Maya Pedal, y ha demostrado una gran utilidad para el riego y la distribución de agua en zonas alejadas. Gracias a este avance, se logra mejorar la vida cotidiana en áreas rurales mediante un dispositivo muy económico. Por Pablo Javier Piacente.


Pablo Javier Piacente
14/06/2010

El desarrollo de una bomba de agua móvil que emplea bicicletas de desecho para su funcionamiento ha marcado un importante avance en la vida cotidiana de localidades rurales guatemaltecas, y podría aplicarse en comunidades similares de todo el mundo gracias a su bajo costo. El dispositivo fue creado por un estudiante de ingeniería de la Universidad de Sheffield, y fue aplicado con la colaboración de la ONG Maya Pedal.

La bomba de agua ha demostrado ser un gran éxito en Guatemala, y ahora se está produciendo a nivel comercial en aquel país, transformando la vida de los residentes rurales. Así lo demuestra una nota de prensa de la Universidad de Sheffield, que también reproduce el medio especializado Science Daily.

Todo comenzó cuando Jon Leary, un estudiante de ingeniería mecánica en Sheffield, imaginó para su trabajo de tesis la posibilidad de diseñar una bomba de agua móvil que pudiera aplicarse en comunidades rurales. Tenía que utilizar algún desecho y volverlo útil, y de esta manera consiguió desarrollar su modelo a partir de bicicletas de descarte, que llegan a Guatemala desde Estados Unidos y Canadá.

Luego de pasar cuatro meses en el país centroamericano, Leary perfeccionó su invento y comenzó a trabajar con la ONG guatemalteca Maya Pedal. El dispositivo fue rápidamente incorporado en las localidades rurales, por su gran utilidad para el riego y la distribución general de agua en zonas de grandes extensiones.

Amplia utilidad social

Estas máquinas pueden mejorar realmente la vida cotidiana de los lugareños, sin necesidad de recurrir a costosos dispositivos eléctricos o a mecanismos que perjudiquen al medio ambiente empleando combustibles fósiles. La bomba de agua móvil de Leary se relaciona directamente con otras ingeniosas máquinas utilizadas por Maya Pedal, como una bicilavadora o un bicimolino de maíz.

El estudiante de Sheffield creó la bomba móvil usando una bicicleta normal, que está conectada con una vieja bomba eléctrica que funciona a partir de la fricción de la rueda trasera del vehículo. La máquina se puso a prueba en distintos rangos de alturas, alcanzando sobre tierra plana una producción de 40 litros de agua por minuto.

En tanto, en terrenos con una elevación de 26 metros, la bomba alcanza un caudal de 5 litros de agua por minuto. Vale remarcar que los 40 litros de agua por minuto logrados sobre predios sin elevaciones equivalen a alrededor de tres duchas normales. Esto permite entender la importancia que puede llegar a tener un dispositivo de este tipo en comunidades alejadas de los grandes centros urbanos.

La construcción de la bomba de agua móvil es realmente muy sencilla. Se requieren solamente herramientas de taller y materiales básicos, como hierro, metal, una bicicleta convencional y una bomba eléctrica estándar. Otra gran ventaja de este diseño, además de su economía y funcionamiento, es indudablemente su movilidad.

El dispositivo es de gran utilidad en la vida cotidiana de comunidades rurales de Guatemala, y podría aplicarse en otras zonas con similares características. Imagen: Universidad de Sheffield.
100 % móvil

Es así que Maya Pedal ya había producido una máquina similar, capaz de extraer agua de pozos de hasta 30 metros de profundidad. Sin embargo, muchos agricultores vivían en pendientes empinadas y querían distribuir el agua una vez que la misma había sido extraída del pozo. Al no contar con los dispositivos necesarios, esa alternativa se dificultaba en gran medida.

A diferencia de otros diseños estáticos, la bicibomba de Leary es completamente móvil. Mientras una persona viaja sentada en la bicicleta, la bomba se pliega sobre un marco dispuesto en la parte superior de la rueda trasera, permitiendo de esta manera efectuar el trabajo en distintas locaciones.

La máquina se encuentra actualmente en etapa de producción comercial en Guatemala, y ya se han desarrollado seis modelos más fuera del original. La colaboración no termina aquí, ya que Leary trabajará próximamente en Guatemala junto a un equipo de tres ingenieros recientemente graduados de la Universidad de Sheffield en el diseño, construcción y prueba de una turbina eólica.

La mencionada turbina será diseñada específicamente para Maya Pedal y se construirá a partir de piezas de bicicletas en desuso y otros materiales de desecho. Desde el Departamento de Ingeniería Mecánica de la Universidad de Sheffield destacaron la importancia social de estas aplicaciones.



Pablo Javier Piacente
Artículo leído 44196 veces



Más contenidos