Comer siete o más piezas de frutas y verduras al día reduce en un 42% el riesgo de muerte

El beneficio se da a cualquier edad, revela un estudio realizado en Inglaterra con más de 65.000 personas


Cuanto más frutas y verduras se coman, menos probable es morir a cualquier edad, ha revelado un estudio del del University College de Londres realizado a partir de una encuesta a más de 65.000 personas. Estos alimentos pueden reducir los riesgos específicos de muerte por cáncer y enfermedades coronarias en un 25 y un 31% respectivamente, y en un 42% el riesgo global de fallecimiento a cualquier edad.


UCL/T21
01/04/2014

Imagen: MLA Photography. Fuente: PhotoXpress.
Comer siete o más piezas de frutas y verduras al día reduce el riesgo de muerte en cualquier momento en un 42%, en comparación con comer menos de una pieza diaria, ha revelado un estudio del University College de Londres.

Las autoras de la investigación utilizaron la Encuesta de Salud de Inglaterra para estudiar los hábitos alimenticios de 65.226 personas, entre 2001 y 2013. Hallaron que cuanto más frutas y verduras comían éstas, menos probable era que muriesen a cualquier edad.

Comer siete o más porciones de estos alimentos reduce los riesgos específicos de muerte por cáncer y enfermedades coronarias en un 25 y un 31% respectivamente. La investigación también demostró que las verduras tienen beneficios para la salud significativamente más altos que los de frutas.

Este es el primer estudio que relaciona el consumo de frutas y verduras con las muertes por cualquier causa en una cantidad de población representativa y a nivel nacional; así como el primero en cuantificar los beneficios para la salud por cada porción y el primero en identificar los tipos de frutas y verduras con el mayor beneficio.

En comparación con el hecho de comer menos de una pieza de frutas y verduras, el riesgo de muerte por cualquier causa se redujo en un 14% por el consumo de entre una y tres porciones, en un 29 % si se consumen entre tres y cinco piezas; en un 36 % si se comen entre cinco y siete porciones; y en un 42% para siete o más .

Estas cifras se ajustaron por sexo, edad, tabaquismo, clase social, índice de masa corporal, educación, actividad física e ingesta de alcohol, y no incluyen las muertes dentro del año en el que se realizó la encuesta alimentaria.

Las verduras frescas, las más protectoras

El estudio, publicado en el Journal of Epidemiology & Community Health, reveló asimismo que las verduras frescas tienen el efecto protector más fuerte, pues con cada porción diaria de éstas se reduce el riesgo global de muerte en un 16%.

La ensalada contribuye a una reducción del riesgo del 13% por ración, y cada pieza de fruta fresca se asocia con una reducción pequeña pero aún significativa, de un 4%.

"Todos sabemos que el consumo de frutas y vegetales es saludable, pero el alcance del efecto es asombroso", asegura la Dra. Oyinlola Oyebode, del Departamento de Epidemiología y Salud Pública, y autora principal del estudio de la UCL.

"El mensaje claro es que cuanto más frutas y verduras se consuman, menos probable es que se vaya a morir a cualquier edad. Los vegetales tienen un efecto beneficioso superior al de la fruta, pero ésta también implica una diferencia real”, continúa Oyebode.

Zumos y conservas

Las investigadoras no encontraron evidencia de un beneficio significativo para la salud del zumo de frutas. Además, parece que las frutas en conserva o congeladas podrían aumentar el riesgo de muerte en un 17% por porción.

Como la encuesta no distinguió entre la fruta en conserva y la congelada, este hallazgo es difícil de interpretar. Lo que sí es cierto, según Oyebode, es que "la mayoría de la fruta conservada contiene altos niveles de azúcar” y que “los impactos negativos en la salud del azúcar pueden ser mayores que los beneficios (de la fruta consumida de este modo)”.

Referencia bibliográfica:

Oyinlola Oyebode, Vanessa Gordon-Dseagu, Alice Walker, Jennifer S Mindell. Fruit and vegetable consumption and all-cause, cancer and CVD mortality: analysis of Health Survey for England data. J Epidemiol Community Health (2014). DOI: 10.1136/jech-2013-203500.



UCL/T21
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