Foto: ct253. Museo del Louvre (París). Fuente: Everystockphoto.
La compañía IBM ha publicado una lista de las innovaciones que, potencialmente, podrían cambiar la forma en que las personas vivirán, trabajarán y actuarán en las ciudades de todo el mundo en los próximos cinco años. Esta lista ha sido elaborada dentro del marco de las investigaciones que viene realizando IBM en el proyecto “IBM Next 5 in 5”.
En un comunicado emitido por la compañía, se afirma que en el próximo lustro las ciudades tendrán sistemas inmunológicos más saludables, sus edificios se construirán con diseños que imitarán a los organismos vivos; los coches y vehículos dejarán de funcionar con combustibles fósiles; se generarán sistemas más inteligentes de gestión del agua y de la energía; y responderán a situaciones de crisis incluso con mayor rapidez que actualmente.
Ciudades superpobladas
Se estima que cada año en el mundo, 60 millones de personas se mudan a las ciudades y áreas urbanas, más de un millón de personas cada semana. El estudio sobre ciudades de IBM ha estado motivado por este incremento sin precedentes de la urbanización en nuestro planeta.
De hecho, el año pasado, se alcanzó un hito en la historia de la humanidad: por vez primera la mayoría de la población de nuestro planeta residía en las ciudades. En esta situación, las ciudades deben afrontar el crecimiento de sus poblaciones y el deterioro de sus infraestructuras, de manera simultánea.
En los próximos años, los sistemas destinados a hacer las urbes más inteligentes harán que éstas cambien en diversos aspectos y puedan hacer frente a su superpoblación.
En primer lugar, las ciudades tendrán sistemas inmunológicos más inteligentes. Según explica IBM, este cambio vendrá provocado por el aumento del peligro de expansión de las enfermedades, consecuencia del incremento en la densidad de población.
Para evitar las pandemias, la tecnología proporcionará herramientas que permitirán a hospitales, escuelas, ayuntamientos y lugares de trabajo detectar mejor, rastrear y prevenir infecciones, como la de la gripe A.
Por otra parte, Internet emergerá como una herramienta de información médica anónima que cada vez contendrá más datos que permitirán a la gente conocer y evitar ciertas enfermedades.
En esta dirección, IBM está trabajando con organizaciones de todo el mundo, como la Global Health and Security Initiative and the Middle East Consortium on Infectious Disease Surveillance (MECIDS), para estandarizar métodos de divulgación de información sanitaria y analizar brotes de enfermedades infecciosas.
En un comunicado emitido por la compañía, se afirma que en el próximo lustro las ciudades tendrán sistemas inmunológicos más saludables, sus edificios se construirán con diseños que imitarán a los organismos vivos; los coches y vehículos dejarán de funcionar con combustibles fósiles; se generarán sistemas más inteligentes de gestión del agua y de la energía; y responderán a situaciones de crisis incluso con mayor rapidez que actualmente.
Ciudades superpobladas
Se estima que cada año en el mundo, 60 millones de personas se mudan a las ciudades y áreas urbanas, más de un millón de personas cada semana. El estudio sobre ciudades de IBM ha estado motivado por este incremento sin precedentes de la urbanización en nuestro planeta.
De hecho, el año pasado, se alcanzó un hito en la historia de la humanidad: por vez primera la mayoría de la población de nuestro planeta residía en las ciudades. En esta situación, las ciudades deben afrontar el crecimiento de sus poblaciones y el deterioro de sus infraestructuras, de manera simultánea.
En los próximos años, los sistemas destinados a hacer las urbes más inteligentes harán que éstas cambien en diversos aspectos y puedan hacer frente a su superpoblación.
En primer lugar, las ciudades tendrán sistemas inmunológicos más inteligentes. Según explica IBM, este cambio vendrá provocado por el aumento del peligro de expansión de las enfermedades, consecuencia del incremento en la densidad de población.
Para evitar las pandemias, la tecnología proporcionará herramientas que permitirán a hospitales, escuelas, ayuntamientos y lugares de trabajo detectar mejor, rastrear y prevenir infecciones, como la de la gripe A.
Por otra parte, Internet emergerá como una herramienta de información médica anónima que cada vez contendrá más datos que permitirán a la gente conocer y evitar ciertas enfermedades.
En esta dirección, IBM está trabajando con organizaciones de todo el mundo, como la Global Health and Security Initiative and the Middle East Consortium on Infectious Disease Surveillance (MECIDS), para estandarizar métodos de divulgación de información sanitaria y analizar brotes de enfermedades infecciosas.
Edificios auto-gestionables
En segundo lugar, las ciudades se construirán cada vez de manera más inteligente. Hasta ahora, los edificios han sido construidos con sistemas de calor, agua, alcantarillado y electricidad independientes entre sí. La tecnología de las nuevas construcciones hará que éstas funcionen como organismos vivos capaces de detectar y responder rápidamente para proteger a sus habitantes, ahorrar en recursos, y reducir las emisiones de carbono.
Esto se conseguirá con sensores instalados en los edificios que controlarán todos los aspectos de éstos, desde la temperatura y la humedad hasta el nivel de ocupación y la luz. En función de los parámetros registrados, los sistemas responderán permitiendo una mayor eficiencia energética, y mejorando la seguridad y el confort de sus ocupantes.
En tercer lugar, cada vez más los vehículos que se usan en las ciudades no utilizarán combustibles fósiles. Gracias a las nuevas tecnologías, sus baterías necesitarán ser recargadas en periodos de tiempo cada vez más largos. Los científicos de IBM trabajan ya en el diseño de baterías que permitirán a los vehículos eléctricos recorrer hasta 800 kilómetros sin recargar.
Estas recargas podrán realizarse gracias a fuentes de suministro, de redes energéticas inteligentes, situadas en sitios públicos. Estas fuentes dispensarán energías renovables, como la eólica. Todo ello reducirá al mínimo la contaminación en las ciudades.
Ahorrando agua
En cuarto lugar, IBM señala que las ciudades habrán de afrontar el incremento exponencial de la demanda de agua (que se espera se multiplique por seis en los próximos 50 años).
Para ello, las urbes instalarán sistemas inteligentes de alcantarillado destinados a purificar el agua desechada para hacerla potable. Las tecnologías más avanzadas ayudarán a las ciudades a reciclar y re-usar el agua a nivel local, reduciendo así en un 50% el gasto de agua, y también el consumo energético derivado del transporte del agua en un 20%.
Contadores interactivos y sensores estarán integrados en los sistemas de agua y energía, proporcionando a los usuarios información exacta y actualizada de su consumo, para el correcto uso de un recurso cada vez más escaso.
Por último, IBM vaticina que las ciudades serán capaces de reducir y de prevenir las emergencias, como crímenes o desastres. Para ello, se crearán sistemas de registro y divulgación de datos a tiempo real.
Salvación tecnológica de las ciudades
Las propuestas lanzadas por IBM podrían evitar el negro futuro augurado por la ONU para las ciudades del mundo. Según esta organización, de seguir como hasta ahora, las grandes ciudades del mundo serán irrespirables e inhabitables en 2030, por lo que los planes de desarrollo sostenible urgen para los centros urbanos.
Anteriormente, hemos conocido otras propuestas tecnológicas para mejorar la calidad de vida en las ciudades, como la del superárbol creado por ingenieros peruanos para descontaminar el aire.
El desarrollo de vehículos de tecnología híbrida también parece prometedor, a juzgar por un estudio reciente del Georgia Institute of Technology de Estados Unidos, que ha demostrado que el uso de estos vehículos, combinado con un “crecimiento inteligente” de las ciudades, podría reducir de manera drástica las emisiones de dióxido de carbono en 2050.
En segundo lugar, las ciudades se construirán cada vez de manera más inteligente. Hasta ahora, los edificios han sido construidos con sistemas de calor, agua, alcantarillado y electricidad independientes entre sí. La tecnología de las nuevas construcciones hará que éstas funcionen como organismos vivos capaces de detectar y responder rápidamente para proteger a sus habitantes, ahorrar en recursos, y reducir las emisiones de carbono.
Esto se conseguirá con sensores instalados en los edificios que controlarán todos los aspectos de éstos, desde la temperatura y la humedad hasta el nivel de ocupación y la luz. En función de los parámetros registrados, los sistemas responderán permitiendo una mayor eficiencia energética, y mejorando la seguridad y el confort de sus ocupantes.
En tercer lugar, cada vez más los vehículos que se usan en las ciudades no utilizarán combustibles fósiles. Gracias a las nuevas tecnologías, sus baterías necesitarán ser recargadas en periodos de tiempo cada vez más largos. Los científicos de IBM trabajan ya en el diseño de baterías que permitirán a los vehículos eléctricos recorrer hasta 800 kilómetros sin recargar.
Estas recargas podrán realizarse gracias a fuentes de suministro, de redes energéticas inteligentes, situadas en sitios públicos. Estas fuentes dispensarán energías renovables, como la eólica. Todo ello reducirá al mínimo la contaminación en las ciudades.
Ahorrando agua
En cuarto lugar, IBM señala que las ciudades habrán de afrontar el incremento exponencial de la demanda de agua (que se espera se multiplique por seis en los próximos 50 años).
Para ello, las urbes instalarán sistemas inteligentes de alcantarillado destinados a purificar el agua desechada para hacerla potable. Las tecnologías más avanzadas ayudarán a las ciudades a reciclar y re-usar el agua a nivel local, reduciendo así en un 50% el gasto de agua, y también el consumo energético derivado del transporte del agua en un 20%.
Contadores interactivos y sensores estarán integrados en los sistemas de agua y energía, proporcionando a los usuarios información exacta y actualizada de su consumo, para el correcto uso de un recurso cada vez más escaso.
Por último, IBM vaticina que las ciudades serán capaces de reducir y de prevenir las emergencias, como crímenes o desastres. Para ello, se crearán sistemas de registro y divulgación de datos a tiempo real.
Salvación tecnológica de las ciudades
Las propuestas lanzadas por IBM podrían evitar el negro futuro augurado por la ONU para las ciudades del mundo. Según esta organización, de seguir como hasta ahora, las grandes ciudades del mundo serán irrespirables e inhabitables en 2030, por lo que los planes de desarrollo sostenible urgen para los centros urbanos.
Anteriormente, hemos conocido otras propuestas tecnológicas para mejorar la calidad de vida en las ciudades, como la del superárbol creado por ingenieros peruanos para descontaminar el aire.
El desarrollo de vehículos de tecnología híbrida también parece prometedor, a juzgar por un estudio reciente del Georgia Institute of Technology de Estados Unidos, que ha demostrado que el uso de estos vehículos, combinado con un “crecimiento inteligente” de las ciudades, podría reducir de manera drástica las emisiones de dióxido de carbono en 2050.